Ya en su primera temporada, Lucas Schneider se ha convertido en la estrella de los jugadores de balonmano de Volendam. El alemán siempre ha tenido la ambición de jugar en el extranjero y se siente como en casa en De Opperdam. “Me encanta Holanda, así que es perfecto para mí”, dice Schneider con entusiasmo.
Schneider jugó en la segunda división de Alemania durante ocho años. A partir de 2012, jugó más de 200 partidos con el TuS Ferndorf. Aún así, su salida de Alemania no fue una sorpresa. “El balonmano en el extranjero siempre fue su sueño”, dice su excompañero y amigo Jannis Michel. “Sabía desde temprana edad que se iría de Alemania por unos años”.
El entrenador de Volendam, Geert Hinskens, vio a Schneider convertirse en un jugador decisivo en su equipo. “Un chico súper bueno, un líder en el grupo y socialmente fuerte. Es fantástico en el balonmano. Un jugador clave en nuestro equipo”, dice Hinskens.
Mejor de tres
La semana pasada, el equipo de Volendam ganó el primer premio al ganar la copa. Ahora el equipo de Geert Hinskens lucha por el campeonato nacional. El domingo, Volendam perdió su primer partido contra Lions, 28-25. El próximo domingo es la vuelta y la semana siguiente el posiblemente decisivo tercer partido.