Unos 40 artesanos del estudio de diseño Gucci dejaron sus herramientas el lunes en la primera huelga de los creativos para impedir el traslado previsto de gran parte del equipo de Roma a Milán.
La marca de lujo italiana, propiedad del conglomerado francés Kering, anunció en octubre que trasladaría a 153 de sus 219 empleados de diseño de la capital a Milán, una medida que los huelguistas describieron como un «despido masivo encubierto».
«Gucci corta pero no cose», decía una pancarta sostenida por manifestantes frente a una de sus oficinas en Roma, mientras que otra decía: «Despedir está de moda en Gucci». “La Style Office es el corazón de Gucci, aquí es donde trabajan los diseñadores y modistos y aquí es donde se crean todas las colecciones. Es la primera huelga en la historia de la empresa”, declaró a la AFP Chiara Giannotti, representante sindical de la marca, antes de la huelga de cuatro horas.
La semana pasada, más de 50 empleados de Gucci participaron en una huelga nacional organizada por los sindicatos más grandes de Italia, dijo Giannotti. «Kering quiere utilizar esta reestructuración para reducir personal y despedir a empleados a quienes se les han ofrecido condiciones inadecuadas o que no pueden salir de Roma porque tienen allí a sus familias e hijos», afirmó.
Gucci dijo a la AFP que la medida «no implica ninguna reducción de personal y se llevará a cabo respetando plenamente la normativa vigente». La empresa también ha proporcionado «una serie de medidas económicas y de apoyo» para los empleados afectados, dijo la empresa.
Mientras que 153 trabajadores serán trasladados a Milán antes de marzo, el destino de los otros 66 trabajadores cualificados que permanecen en Roma es «incierto», dijeron los sindicatos. «Exigimos las mismas condiciones para todos en el caso del traslado a Milán o el traslado de empleados a otras empresas de Kering en Roma o Florencia», afirmó Giannotti.
Gucci cambió de director artístico en enero y sumó a Sabato De Sarno para sustituir a Alessandro Michele. Michele había revolucionado la marca durante los últimos siete años con sus diseños excéntricos y de género y desfiles inusuales. (AFP)