El fabricante austriaco de fibras Lenzing AG sigue sufriendo las malas condiciones económicas. El viernes, la empresa informó de una disminución de las ventas y de elevadas pérdidas en los primeros nueve meses del actual ejercicio financiero 2023. Al mismo tiempo, anunció nuevas medidas de reducción de costes. También se eliminarán numerosos puestos.
El fabricante de fibras sufre la persistente debilidad del entorno del mercado
En los meses de enero a septiembre, el grupo generó unas ventas de 1.870 millones de euros. Esto significa que los ingresos cayeron un 5,3 por ciento en comparación con el mismo período del año pasado.
La empresa admitió en un comunicado que aún no se ha producido la “recuperación esperada” en los mercados relevantes para el productor de fibra. En particular, “los costes de las materias primas y la energía, que siguen aumentando significativamente, por un lado, y la demanda muy moderada, por el otro”, tuvieron un impacto negativo en el desarrollo empresarial.
Los efectos del débil entorno del mercado también provocaron una caída de los beneficios. El beneficio antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización (EBITDA) ascendió a 219,1 millones de euros, un 16,7 por ciento menos que el nivel correspondiente del año anterior. El resultado final fue una pérdida neta de 96,7 millones de euros, después de que el grupo hubiera logrado un superávit de 74,9 millones de euros en el mismo período del año anterior.
Lenzing planea grandes recortes de empleos
En vista del continuo débil desarrollo, la empresa intensificó sus esfuerzos de reforma. Además del programa de ahorro iniciado hace un año, el grupo ha anunciado ahora otras medidas. El plan consiste en reducir los costes de personal en hasta 30 millones de euros recortando “alrededor de 500 equivalentes a tiempo completo”.
Según la empresa, los ahorros deseados se lograrán “no cubriendo los puestos que quedan vacantes debido a jubilaciones y fluctuaciones naturales, así como mediante recortes de empleos”. Para las localidades austriacas de Lenzing y Heiligenkreuz, “se está negociando actualmente con el comité de empresa un plan social cuya aplicación comenzará en el primer trimestre de 2024”, según un comunicado.
La junta espera que las medidas ahora decididas supongan un «ahorro de costes anual de más de 100 millones de euros, de los cuales alrededor del 50 por ciento se harán efectivos a partir del próximo ejercicio». El objetivo general del grupo es garantizar «una resiliencia significativamente mayor a largo plazo ante las crisis» y «una mayor agilidad frente a los cambios del mercado», explicó Lenzing.