El fabricante de fibras austriaco Lenzing, junto con sus socios Artistic Milliners de Pakistán, Canatiba de Brasil y Textil Santanderina de España, ha iniciado la primera fase de una nueva iniciativa de reciclaje de fibras Tencel.
Con el objetivo de promover la economía circular en la industria textil mundial, la nueva iniciativa inicia la producción a escala comercial de telas de mezclilla a partir de residuos de Lyocell reciclados mecánicamente preconsumo de la marca Tencel, sin utilizar agua ni productos químicos. Las nuevas fibras Tencel Lyocell son conocidas por su proceso de producción cerrado, en el que la pulpa de madera producida de manera sostenible se convierte en fibras celulósicas con una alta eficiencia de recursos y una baja huella de carbono.
“Las marcas y los consumidores cuentan con nosotros para liderar el cambio hacia una cadena de valor industrial más sostenible”, dijo Tuncay Kılıçkan, director de Desarrollo de Negocios Globales de Lenzing, Denim, en un comunicado.
“Mientras buscamos continuamente formas de mejorar la circularidad en varios componentes de la industria textil, nuestros socios de la cadena de valor de décadas de ideas afines han descubierto de manera innovadora el reciclaje mecánico de las fibras Tencel Lyocell en la producción de mezclilla. Si bien este concepto aún es relativamente nuevo para toda la industria, el desarrollo de la ‘Iniciativa de reciclaje de fibra’ de Tencel tiene como objetivo promover los beneficios y desbloquear todo el potencial del nuevo tejido circular”, agrega Kılıçkan.
Las fibras Tencel Lyocell recicladas mecánicamente son “ideales para la mezclilla”, según el equipo de desarrollo de productos de Canatiba. “A diferencia del algodón, el nuevo tejido conserva sus propiedades en comparación con las nuevas fibras, conservando la longitud, la durabilidad y todas las propiedades físicas, además de ser súper suave al tacto. Está elaborado mediante un proceso completamente limpio y sostenible que no utiliza agua ni productos químicos. En Brasil, las fibras de lyocell recicladas mecánicamente tienen un gran potencial para atraer a las grandes marcas y grandes almacenes”, dijo el equipo.
Las telas hechas de fibras Tencel Lyocell recicladas mecánicamente presentan una estética “similar al algodón” al tiempo que conservan las propiedades centrales de las fibras Tencel Lyocell, como la transpirabilidad, la caída suave, la piel agradable y la comodidad duradera. Las fibras también son identificables en los productos finales, lo que garantiza la trazabilidad y la transparencia de los procesos de producción.
“Creemos que el futuro de la industria textil pasa por la sostenibilidad y la economía circular, que también pueden garantizar la supervivencia del denim”, afirma José Antonio Mazorra, responsable de RSC de Textil Santanderina.
“La conciencia de reducir el impacto ambiental en nuestro sector está creciendo, impulsada en particular por las tendencias de la industria hacia la economía circular y las prácticas de producción sostenible. Espero que las innovaciones y mejoras tecnológicas en torno a la economía circular, incluidas las etapas de recolección, selección y reciclaje, lleven a una mayor necesidad de fibras celulósicas recicladas mecánicamente”, concluye Mazorra.