El jueves pasado, se detuvieron las búsquedas en Le Vernet del niño francés. El lunes se abrió una investigación preliminar, pero debido a la “complejidad del caso”, el martes ya se inició una investigación judicial. La causa de la desaparición de Émile aún está bajo investigación. “Todas las vías permanecen abiertas y ninguna pista será excluida o favorecida”, dijo el fiscal Remy Avon.
Durante las búsquedas en la primera semana después de la desaparición del niño, se recopiló una “cantidad considerable de información”. Toda esa información ahora está siendo analizada. Según Jacques Fombonne, general de gendarmería, la investigación judicial “podría llevar varios años”.
En la pequeña aldea donde desapareció el niño, mientras tanto, temen que Émile se haya perdido en los campos y haya caído en un apero de labranza. El fin de semana pasado, por lo tanto, se usaron detectores de metales para buscar al niño, pero eso tampoco arrojó nada.