Las ganancias de ING caen debido a la alta inflación en Turquía y la guerra en Ucrania

En un trimestre con incertidumbres en muchas áreas, ING logró una ganancia significativamente menor que el año pasado. En particular, una reducción en las actividades turcas y las tensiones geopolíticas provocaron una caída del 20 por ciento en las ganancias. El banco dice que está bien preparado para «una recesión leve».

En total, ING logró un beneficio neto de 1.180 millones de euros entre abril y junio, frente a los 1.460 millones de euros del mismo periodo del año pasado.

En el segundo trimestre, ING principalmente tuvo que reducir drásticamente sus reservas monetarias en Turquía. El país sufre de hiperinflación. Las normas internacionales de contabilidad dictan que si la inflación supera el 100 por ciento acumulativamente durante tres años, debe intervenir. De lo contrario, el valor en libros ya no reflejaría el valor razonable de los activos. ING propone por tanto una amortización de 244 millones de euros. En Turquía, ING tiene aproximadamente 7 mil millones de euros en préstamos pendientes, menos del 1 por ciento de todos los préstamos pendientes. El pago de esos préstamos turcos va bien, según el banco.

Tensiones geopolíticas

Las tensiones geopolíticas tampoco están ayudando al banco. Debido a las consecuencias económicas de la guerra en Ucrania, ING ha puesto 202 millones de euros en el llamado bote de soga. Esta es una reserva para préstamos que ya no pueden ser reembolsados. El banco espera que, por ejemplo, debido a los altos precios del gas, los clientes y las empresas ya no puedan pagar sus facturas.

ING aún no está muy preocupado por una posible recesión que se avecina. El director ejecutivo, Steven van Rijswijk, dijo que la alta inflación es su mayor temor el jueves por la mañana, pero dice que el banco está «bien preparado» para absorber las consecuencias. Sin embargo, no hay indicaciones concretas de que la inflación ya esté provocando que los clientes a gran escala no puedan pagar sus préstamos.

Alta inflación

ING tampoco teme que la alta inflación también conduzca a amortizaciones en las actividades holandesas. Aunque el nivel de inflación en los Países Bajos es históricamente alto en más del 10 por ciento, no está ni cerca del nivel de Turquía (donde la inflación fue de casi el 80 por ciento en julio). Para todo el año, ING espera que la inflación en los Países Bajos sea del 9,8 por ciento. «No hemos visto eso en mucho tiempo», dice Van Rijswijk. Señala las cuentas de ahorro de consumo generalmente todavía bien llenas. “Esperamos que cuando la economía se recupere, la gente comience a gastar rápidamente de nuevo”.

El aumento de las tasas de interés ayudó a ING a generar más ingresos. Como resultado, el banco gana más con los préstamos que emite. El pasado mes de junio, el Banco Central Europeo elevó los tipos de interés por primera vez en más de una década. En respuesta, ING anunció que eliminaría la tasa de interés negativa para ahorros superiores a 100.000 EUR a partir de octubre. «A pesar de las difíciles circunstancias, estoy satisfecho con nuestros resultados», dice Van Rijswijk.



ttn-es-33