El clima empresarial en el comercio minorista se ha deteriorado notablemente.
El índice Ifo para el sector cayó de -19,5 puntos en junio a -25,4 puntos en julio. Los minoristas no sólo evalúan con mucha más cautela su situación comercial actual, sino que sus expectativas para finales de año también se han deteriorado aún más. “Cada vez es menos probable que se produzca una recuperación significativa del negocio en el actual semestre”, afirma el experto del Ifo, Patrick Höppner.
Para el segundo trimestre, el 54 por ciento de los minoristas reportaron una demanda insuficiente. Los vendedores de bicicletas, ropa, muebles y accesorios consideran que su situación comercial es especialmente tensa. Los minoristas de electrotecnia y electrodomésticos, así como las farmacias, informan de una evolución desfavorable de su negocio. Las tiendas de comestibles y los concesionarios de automóviles también están menos satisfechos. En general, el sector minorista planea reducir su necesidad de personal, afirma Höppner. (dpa)