Las emisiones de Google aumentan casi un 50% en cinco años a medida que aumenta el uso de IA


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Las emisiones de gases de efecto invernadero de Google han aumentado un 48 por ciento en los últimos cinco años debido a la expansión de sus centros de datos que sustentan los sistemas de inteligencia artificial, lo que pone en duda su compromiso de llegar al “cero neto” para 2030.

La contaminación de la empresa de Silicon Valley ascendió a 14,3 millones de toneladas de carbono equivalente en 2023, un aumento del 48 por ciento respecto de su línea de base de 2019 y un aumento del 13 por ciento desde el año pasado, dijo Google en su informe ambiental anual el martes.

Google dijo que el salto destacó “el desafío de reducir las emisiones” al mismo tiempo que invierte en el desarrollo de grandes modelos de lenguaje y sus aplicaciones e infraestructura asociadas, admitiendo que “el impacto ambiental futuro de la IA” era “complejo y difícil de predecir”.

La directora de sostenibilidad, Kate Brandt, dijo que la empresa seguía comprometida con el objetivo de 2030, pero destacó la naturaleza “extremadamente ambiciosa” del objetivo.

“Aún esperamos que nuestras emisiones sigan aumentando antes de disminuir hacia nuestro objetivo”, dijo Brandt.

Agregó que Google estaba “trabajando muy duro” para reducir sus emisiones, incluso firmando acuerdos para energía limpia. También había una “tremenda oportunidad para soluciones climáticas que son posibles gracias a la IA”, dijo Brandt.

Mientras los gigantes de la gran tecnología, como Google, Amazon y Microsoft, han delineado planes para invertir decenas de miles de millones de dólares en IA, los expertos en clima han expresado su preocupación por los impactos ambientales de las herramientas y sistemas que consumen mucha energía.

En mayo, Microsoft admitió que sus emisiones habían aumentado casi un tercio desde 2020, en gran parte debido a la construcción de centros de datos. Sin embargo, el cofundador de Microsoft, Bill Gates, también argumentó la semana pasada que la IA ayudaría a impulsar soluciones climáticas.

Mientras tanto, las limitaciones en la generación y transmisión de energía ya están planteando un desafío para las empresas que buscan desarrollar la nueva tecnología. Los analistas de Bernstein dijeron en junio que la IA “duplicaría la tasa de crecimiento de la demanda de electricidad en Estados Unidos y el consumo total podría superar la oferta actual en los próximos dos años”.

En el informe del martes, Google dijo que sus emisiones relacionadas con la energía en 2023 (que provienen principalmente del consumo de electricidad de los centros de datos) aumentaron un 37 por ciento año tras año y, en general, representaron una cuarta parte de sus emisiones totales de gases de efecto invernadero.

Las emisiones de la cadena de suministro de Google (la mayor parte, ya que representa el 75 por ciento de sus emisiones totales) también aumentaron un 8 por ciento. Google dijo que “seguirían aumentando en el corto plazo” como resultado, en parte, de la construcción de la infraestructura necesaria para operar los sistemas de inteligencia artificial.

Google se ha comprometido a alcanzar cero emisiones netas en sus emisiones directas e indirectas de gases de efecto invernadero para 2030, y a funcionar con energía libre de carbono durante todas las horas de cada día dentro de cada red que opera para la misma fecha.

Gráfico de barras de millones de toneladas métricas de dióxido de carbono equivalente (tCO2e) que muestra que la mayoría de las emisiones de Google provienen de la energía y su cadena de suministro.

Sin embargo, la compañía advirtió en el informe del martes que la “terminación” de algunos proyectos de energía limpia durante 2023 había reducido la cantidad de energías renovables a las que tenía acceso.

Mientras tanto, el consumo de electricidad del centro de datos de la compañía había “superado” la capacidad de Google para poner en marcha más proyectos de energía limpia en las regiones de Estados Unidos y Asia-Pacífico.

El consumo de electricidad de los centros de datos de Google aumentó un 17 por ciento en 2023 y representó aproximadamente entre el 7 y el 10 por ciento del consumo de electricidad de los centros de datos a nivel mundial, según estimó la empresa. Sus centros de datos también consumieron un 17 por ciento más de agua en 2023 que durante el año anterior, afirmó Google.

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