Las acciones asiáticas cayeron y los rendimientos de los bonos del Tesoro rondaron los máximos de 20 años el jueves después de que Fitch Ratings puso a EE.
El índice Hang Seng de Hong Kong perdió un 2 por ciento, mientras que el S&P/ASX 200 de Australia cayó casi un 1 por ciento y el índice de referencia CSI 300 de China cayó un 0,5 por ciento. El Topix de Japón fue plano.
Las pérdidas de las acciones en toda la región se produjeron después de que la agencia calificadora Fitch dijera que había puesto su calificación crediticia triple A para EE. UU. en vigilancia negativa, lo que indica a los inversionistas que podría ocurrir una rebaja.
Fitch colocó a EE. UU. en vigilancia negativa por última vez durante las negociaciones del techo de deuda en Washington en octubre de 2013, dos días antes de la llamada fecha X de ese año, cuando se esperaba que el gobierno se quedara sin efectivo.
“Creemos que han aumentado los riesgos de que el límite de deuda no se eleve o suspenda antes de la fecha X y, en consecuencia, que el gobierno pueda comenzar a incumplir los pagos de algunas de sus obligaciones”, dijo la agencia calificadora.
Fitch dijo que su decisión reflejó «un mayor partidismo político que impide llegar a una solución para aumentar o suspender el límite de deuda a pesar de que la fecha X se acerca rápidamente».
Los rendimientos de las letras del Tesoro que vencen el próximo mes, alrededor de la fecha esperada en que el gobierno podría quedarse sin dinero, disminuyeron a 5,67 por ciento en el comercio asiático, más abajo que un máximo de 5,88 por ciento alcanzado a principios de esta semana, pero aún cerca del nivel más alto en más de dos décadas. Los rendimientos de los bonos del Tesoro a dos años y las notas a 10 años también fueron ligeramente más bajos.
La liquidación en Asia siguió a otro mal desempeño en Wall Street, donde el S&P 500 cayó un 0,7 por ciento y el Nasdaq Composite, centrado en tecnología, perdió un 0,6 por ciento, ya que los operadores se pusieron más nerviosos ante la perspectiva de un incumplimiento de pago de Estados Unidos en junio.
Sin embargo, las acciones de semiconductores resistieron la tendencia y registraron ganancias descomunales después de que el fabricante estadounidense de chips Nvidia pronosticara que las ventas alcanzarían los 11.000 millones de dólares durante los tres meses hasta finales de julio, superando con creces las expectativas de los analistas debido a la creciente demanda de chips utilizados en sistemas de inteligencia artificial generativa.
Las acciones de Nvidia subieron hasta un 29 por ciento en el mercado secundario tras el anuncio, mientras que en Asia, Taiwan Semiconductor Manufacturing y SK Hynix de Corea del Sur subieron alrededor de un 3 y un 5 por ciento, respectivamente.
Los futuros indicaron que el S&P 500 subiría un 0,4 por ciento cuando comiencen las operaciones en Wall Street más tarde ese día, mientras que el FTSE 100 subiría un 0,3 por ciento.