Largo Covid y pérdida de memoria, por eso


¿Qué une al Covid largo y ‘la hormona del buen humor’? Después de la pandemia, comprender el mecanismo que desencadena las secuelas posinfección sigue siendo el desafío de salud global en el que diversos grupos de científicos están centrando sus esfuerzos. Uno de estos equipos cuestiona la serotonina -o más bien su reducción- como posible explicación de las persistentes dificultades de concentración, de atención y de memoria, así como de otros síntomas, a menudo debilitantes, asociados al Long Covid.

Estudio citado en Science

La hipótesis formulada por los autores del estudio publicado en ‘Cell’, y citado también en ‘Science’ online, es que la inflamación desencadenada en respuesta al virus Sars-CoV-2 provoca una disminución de la serotonina -que entre las diversas funciones es que es el «mensajero químico» implicado en la regulación del estado de ánimo y la digestión, y que esta disminución, a su vez, causa problemas cognitivos.

Menos serotonina en la sangre.

El trabajo científico tiene como punto de partida una observación de investigadores de Penn Medicine: las personas que asistieron a una clínica dedicada al post-Covid tenían niveles más bajos de serotonina en sangre que las personas que se habían recuperado completamente de la infección. Los pacientes con Covid agudo también mostraron esta reducción de la serotonina en sangre. Los investigadores se preguntaron si la infección viral podría reducir los niveles de esta sustancia. Más aún porque algunos estudios previos ya habían insinuado un vínculo entre los niveles de serotonina y los síntomas post-Covid (aunque otras investigaciones no demostraron tal asociación). Para verificar lo que observaron, el equipo infectó ratones con Sars-CoV-2 o les inyectó un fármaco que estimula una respuesta inflamatoria similar.

Experimentos en ratones

Ambos tratamientos provocaron una caída de la serotonina en la sangre, dijo el coautor del estudio Maayan Levy, microbiólogo de la Facultad de Medicina Perelman de la Universidad de Pensilvania. Lo que sucede es que en el intestino del ratón se dificulta la absorción del triptófano de la dieta, un precursor químico de la serotonina presente en muchos alimentos, incluidos el pescado y los lácteos. Y también se ve comprometido el transporte de la molécula a través de las plaquetas al torrente sanguíneo. Por último, también parece potenciada la actividad de una enzima que descompone la serotonina. Estos tres factores juntos provocan que se reduzcan los niveles periféricos de serotonina. Los investigadores vincularon estos cambios con el desempeño de los ratones en las pruebas de memoria.

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Hallazgos aún por encontrar

El coautor Christoph Thaiss, de la Facultad de Medicina Perelman, dice que los hallazgos sugieren que una reducción de esta serotonina «periférica» ​​que circula fuera del cerebro y la médula espinal afecta al hipocampo al desencadenar un efecto en cascada. Es importante recordar que probablemente existen múltiples tipos de Covid prolongado, impulsados ​​por diferentes causas fundamentales, observa Akiko Iwasaki, inmunobióloga de la Facultad de Medicina de Yale. Un nivel bajo de serotonina puede definir un tipo particular, dice, aunque se necesita más trabajo para saber cómo esto podría causar síntomas cognitivos.



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