El horrible incidente ocurrió en un municipio remoto a unos 100 kilómetros al norte de la capital, Antananarivo. La policía busca a los perpetradores. Se sospecha que fue un acto de venganza de los ladrones de ganado. En el norte de Madagascar, el robo de ganado suele provocar enfrentamientos violentos entre los residentes y los delincuentes.