La prohibición de venta de coches térmicos en Europa para 2035 es inminente


El Parlamento Europeo ha pronunciado, el pasado 14 de febrero, a favor de la normativa destinada a prohibir la venta de coches térmicos en 2035. Para entonces, los fabricantes de automóviles tendrán que distribuir únicamente coches nuevos eléctricos o de hidrógeno. En las próximas semanas, el Consejo deberá, a su vez, examinar el texto.

Los coches de gasolina, diésel o híbridos ya no se pueden vender

Hoy en día, se venden más de 10 millones de automóviles en la Unión Europea cada año, lo que representa el 14% del mercado mundial de automóviles. La votación de los eurodiputados (340 a favor, 279 en contra, 21 abstenciones) podría, por tanto, modificar considerablemente el mundo del transporte.

En la misma categoría

Los transbordadores autónomos de Zoox circulan por la vía pública por primera vez

A grandes rasgos, el texto sigue siendo el mismo que el negociado a finales de octubre por el Parlamento y el Consejo. Para 2030, el 55% de los automóviles vendidos por marcas deben ser libres de CO2, el 50% para los vendedores de furgonetas. 5 años después, en 2035, todas las marcas de automóviles estarán obligadas a ofrecer únicamente vehículos con cero emisiones de CO2. Gasolina, diésel, GLP, E85 e incluso coches híbridos ya no podrán comercializarse en el Viejo Continente.

Los eurodiputados decidieron hacer el texto más ambicioso, en comparación con la versión inicial de la Comisión. Quieren que las autoridades europeas exijan para 2025 que al menos el 25% de las ventas de automóviles nuevos y el 17% de las camionetas sean modelos de cero emisiones. A cambio, las empresas que lo consigan podrán beneficiarse de bonificaciones hasta 2029.

El texto siempre incluye una cláusula polémica, apodada “Ferarri”. Los pequeños fabricantes que produzcan menos de 10.000 coches al año o 22.000 furgonetas al año solo se verán afectados por la prohibición de 2035. Las marcas que distribuyan menos de 1.000 coches al año estarán completamente exentas de la normativa. Esta enmienda es debatida: como su apodo indica, los fabricantes exentos son casi exclusivamente los del sector del lujo.

Los ministros europeos se reunirán en marzo para adoptar el texto

Cuando se adopte el texto, le corresponderá a la Comisión Europea desempeñar el papel de policía para monitorear el progreso del sector. La institución será la encargada de informar a la ciudadanía de la evolución de la situación a través de diversas herramientas: se pondrá en marcha un indicador de emisiones de gases del ciclo de vida completo de los vehículos vendidos en la Unión Europea antes de 2025, el seguimiento del desfase entre los límites de emisión de CO2 y las liberaciones reales comenzarán a partir de diciembre de 2026 y se publicará un informe cada dos años para evaluar las mejoras ecológicas del sector.

Esta nueva legislación se enmarca en el objetivo de la Unión Europea de reducir un 55% sus emisiones en todo su territorio para 2030, respecto a 1990. Es la primera etapa del plan europeo Fit For 55 cuyo objetivo es respetar el acuerdo de París, la neutralidad en carbono en 2050.

Este plan afecta a otras partes del sector del transporte en la Unión Europea. La Comisión Europea propuso recientemente reducir las emisiones de camiones y autobuses en un 45 % para 2030 y en un 90 % para 2040. Según Bloomberglos Países Bajos quieren medidas más severas con el 100 % para 2035.

Respecto a la prohibición de la venta de coches térmicos en 2035, ahora habrá que esperar a la deliberación del Consejo de la Unión Europea. En marzo, según Reuters, los ministros de transporte de los países miembros examinarán a su vez el texto con miras a su adopción.



ttn-es-4