La policía alemana arrestó a 25 presuntos radicales de derecha sospechosos de planear derrocar al estado en un golpe violento, en un complot que muestra la propagación de teorías de conspiración al estilo de QAnon en las grandes democracias occidentales.
Los arrestos se llevaron a cabo como parte de una serie de redadas en todo el país que incluyeron registros de más de 130 locales, lo que indica una supuesta conspiración a gran escala.
Un comunicado de la oficina del fiscal federal el miércoles dijo que los arrestados, incluidos dos de los cabecillas del complot, eran sospechosos de ser miembros o simpatizantes de una “organización terrorista nacional”.
Dijo que el grupo, fundado en noviembre de 2021, tenía como objetivo “superar el sistema estatal existente en Alemania y reemplazarlo con una forma de estado, cuyas características esenciales ya estaban preparadas”.
Los conspiradores eran conscientes de que solo podrían lograr sus objetivos “desplegando medios militares y violencia contra los representantes del estado”, y eso implicaría matar personas.
La declaración decía que estaban unidos por un “rechazo de las instituciones estatales y la constitución democrática liberal de la República Federal de Alemania”, que se había convertido en “preparaciones concretas” para su derrocamiento violento.
La agencia de noticias DPA dijo que los investigadores también tenían como objetivo a un soldado que sirve en la KSK, la unidad de fuerzas especiales de Alemania. Dijo que su casa y oficina en un cuartel en la ciudad sureña de Calw habían sido registradas. En el pasado, la unidad ha sido objeto de escrutinio por los vínculos de algunos de sus miembros con grupos de extrema derecha.
Agregó que los miembros del grupo estaban motivados por teorías de conspiración como QAnon y estaban vinculados al “Reichsbürger” (ciudadanos del Reich), un movimiento de derecha radical que no reconoce la autoridad de la república federal. “Están completamente convencidos de que Alemania está gobernada por miembros del llamado estado profundo”, dijo.
La oficina del fiscal dijo que el “brazo militar” del grupo planeaba derrocar violentamente las instituciones democráticas en los pueblos y ciudades alemanes. El grupo formaría un gobierno militar de transición que negociaría un nuevo sistema estatal en Alemania con las potencias aliadas victoriosas de la segunda guerra mundial.
Con este objetivo en mente, dijo que uno de los hombres arrestados, identificado como Heinrich XIII PR, ya se había puesto en contacto con representantes del gobierno ruso en Alemania. Sin embargo, hasta el momento no había evidencia de que los rusos hubieran reaccionado positivamente a su solicitud.
El comunicado del fiscal dijo que los sospechosos habían estado preparando su golpe desde fines de noviembre del año pasado, planificando estructuras administrativas, adquiriendo equipos, realizando prácticas de tiro y reclutando nuevos miembros. El grupo estaba dirigido por un “consejo” con Heinrich XIII PR a la cabeza. La organización lo ve como un futuro jefe de estado.
Los fiscales dijeron que el brazo militar del grupo incluía a ex soldados de la Bundeswehr, las fuerzas armadas de Alemania. La unidad militar estaba en proceso de establecer un sistema de “compañías de seguridad nacional” que tomarían el control a nivel local.
El grupo buscó reclutar reclutas entre los soldados y la policía de la Bundeswehr y exploró los cuarteles del ejército en el sur de Alemania para ver si podían acomodar a sus propias tropas después del golpe.
Los investigadores también sospechan que ciertos miembros del grupo se habían estado preparando para asaltar el Bundestag alemán, el parlamento del país, con un pequeño grupo armado.