Por Danilo Gladow
Alrededor de 1.900 aficionados marchan hacia el Estadio Olímpico para asistir al partido internacional de fútbol entre Alemania y Turquía. Aunque el ambiente es tranquilo, la policía tiene que detener el tren una y otra vez.
El sábado por la tarde se jugará un partido amistoso de fútbol entre Alemania y Turquía en el Estadio Olímpico (inicio: 20:45 horas).
A última hora de la tarde, varios grupos partieron para una marcha de aficionados desde Theodor-Heuss-Platz (Westend) hasta el estadio.
Según la policía, se trata de una estructura de aficionados equilibrada. Al principio, los funcionarios no esperaban que se produjeran disturbios.
Nuestros periodistas informan que los partidarios de Turquía son muy ruidosos pero pacíficos. A las seis de la tarde, la policía detuvo a siete personas. El tren es detenido repetidamente debido al uso de pirotecnia. Las declaraciones de la policía son recibidas con abucheos.
Poco después de las 19.00 horas, la marcha de aficionados llegó pacíficamente al recinto olímpico sin más incidentes.
La policía de Berlín ha contado con el apoyo de varios otros estados federados y de la policía federal.