El cuenco de comedor forma parte de la serie ‘Hollands Glorie’ de Blond Amsterdam. Entre el queso, los zuecos, los tulipanes y los molinos de viento, el cuenco del comedor también presenta un dibujo de una Ana Frank sonriente.
El Centro de Información y Documentación de Israel (CIDI), entre otros, había criticado la imagen “extremadamente inapropiada” de una Ana Frank sonriente en la vajilla. Este “no es el contexto en el que debería ser recordada. Y desafortunadamente su destino no fue exactamente un ejemplo de ‘Gloria holandesa'”, la respuesta fue en Twitter. Y a muchos otros tampoco les gustó la elección de la marca del servicio.
Como resultado de las críticas, el fabricante decidió retirar los tazones de los estantes esta noche. “La serie en la que apareció el cuenco debería ser un recordatorio positivo de las escenas y los héroes holandeses de los que estamos orgullosos. Desafortunadamente, este sentimiento no se transmite a todos de la manera que habíamos imaginado. Esa no era en absoluto nuestra intención. Encontramos esto muy molestos y estamos conmocionados por esto”, responde Blond Amsterdam.
Los ingresos de los cuencos ya vendidos se donarán íntegramente a una organización benéfica que aún no ha sido elegida, ha anunciado la empresa.
Ana Frank (1929-1945) vivió durante dos años con su familia y otros cuatro judíos escondidos de los nazis en un anexo secreto en Amsterdam. Allí escribió su diario, que ahora es mundialmente famoso. En 1944 el escondite fue delatado y los habitantes fueron deportados a campos de concentración. Solo sobrevivió el padre de Frank, Otto.