La guardia fronteriza europea Frontex no tiene que pagar ninguna indemnización a una familia siria que regresa. Según el Tribunal de Justicia de las Comunidades Europeas, la responsabilidad de la deportación recae en los Estados miembros europeos.
Frontex apoya a los Estados miembros europeos, pero según el tribunal no puede juzgar si la decisión sobre una solicitud de asilo o una decisión de expulsión es correcta. Según el tribunal, los propios Estados miembros son responsables de ello. En este caso, Grecia tiene la responsabilidad.
Si la guardia fronteriza europea no hubiera enviado a la familia a Turquía, Grecia habría devuelto a los sirios sin la ayuda de Frontex. Por lo tanto, la Guardia Europea de Fronteras no es responsable de la deportación, dictaminó el miércoles el Tribunal de Justicia Europeo.
Lisa-Marie Komp, la abogada de la familia, no estuvo disponible de inmediato para hacer comentarios. No está claro si la familia apelará el fallo.
Om welke Europese asielregels gaat het?
Vluchtelingen hebben in Europa asielrecht. Dat is het recht om in Europa te blijven als je gevaar loopt in je land van herkomst. Als iemand een asielaanvraag doet, volgt een procedure waarin wordt gecontroleerd of iemand daadwerkelijk recht heeft op asiel. Daar komt een besluit uit. Tegen dat besluit kan de vluchteling nog bezwaar maken.
Als definitief wordt besloten dat iemand geen recht heeft op asiel, volgt de tweede stap: een uitzettingsbesluit. In dat besluit wordt vastgesteld of een persoon ook daadwerkelijk uitgezet mag worden. Mensen mogen namelijk niet zomaar op straat worden gezet.
Una familia exigió 140.000 euros a la guardia de fronteras europea
Una familia siria llevó a Frontex a los tribunales a finales de 2021. Los sirios llegaron a Grecia en 2016, donde solicitaron asilo. Once días después, la guardia fronteriza y las autoridades griegas enviaron a la familia a Turquía. Grecia no tramitó la solicitud de asilo y no hubo decisión de expulsión.
Esto va en contra de los derechos humanos, dijo anteriormente el abogado Komp a NU.nl. “No se puede simplemente deportar a la gente a otro país”, dijo. “Antes de deportar a alguien, primero hay que evaluar si tiene derecho a asilo. Eso no ha sucedido aquí”.
Los familiares pidieron el reconocimiento de las violaciones de derechos humanos cometidas por Frontex y exigieron una indemnización de 140.000 euros. Se suponía que ese dinero compensaría los daños inmateriales y cubriría los costos de la vida que han construido en el norte de Irak. Los miembros de la familia huyeron de Turquía a Irak porque temían ser enviados de regreso a Siria desde Turquía.
Pero el juez no está de acuerdo.
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