29
“Desearía haber hecho las cosas de manera diferente, pero tal vez no por una de las razones más comunes. Tuve mi primer hijo a los 33, el segundo a los 35 y adopté a mi tercer (¡y último!) hijo cuando tenía 37 años. Mi esposo y Esperé a tener hijos debido a una miríada de circunstancias, algunas relacionadas con la fertilidad y otras financieras. Además de ser una de las madres más viejas en las clases de preescolar de mis hijos, todo era lo que esperaba. Pero luego mi esposo se comprometió. Me suicidé en 2020 y me quedé solo para criar a tres niños muy pequeños. Creo que si hubiera sido más joven cuando tuve a mis hijos, estaría mejor equipado físicamente para cuidarlos ahora”.
“Después de todo, tengo que ser mamá y papá de tres niños, todos menores de 8 años. Es agotador. Todos tienen amigos con padres jóvenes que parecen estar en un lugar de la vida tan diferente al mío. Mis amigos tienen hijos en secundaria y preparatoria, por lo que ya no necesitan niñeras ni horas de siesta. Ya no hacemos fila. Siento que si hubiera tenido a mis hijos más temprano en la vida, todo habría sido más fácil”.
—Adrián, 42