Cuando la central nuclear de su ciudad fue incendiada, Natalya Goncharava (51) tuvo que elegir: su país o su salud. La ucraniana tiene cáncer de mama y debido a la guerra su tratamiento en casa no era una prioridad. Gracias a su amigo flamenco Danny (52) puede continuar su quimioterapia en nuestro país: “Echo de menos mi casa. Pero mi vida es lo primero, ahora.
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