Francia tiene y necesitará baterías en el futuro. En el marco del plan de recuperación Francia 2030, el Comisariado de Energía Atómica y Energías Alternativas (CEA) y el Centro Nacional de Investigaciones Científicas (CNRS) han lanzael 10 de enero de 2023, el Programa y Equipos Prioritarios de Investigación (PEPR) denominado “Apoyo a la innovación para desarrollar futuras generaciones de baterías”.
En un tiempo limitado, los investigadores tendrán que “producir el máximo de conocimiento”
El PEPR es parte de la estrategia nacional de aceleración para el desarrollo de baterías. El gobierno quiere que las dos instituciones ayuden a aumentar la oferta y la demanda en Francia.
Este plan pretende impulsar la transición energética en el ámbito del transporte. También servirá para progresar en el sector de la aeronáutica, baterías espaciales u objetos conectados. Para 2030, el objetivo es dar a Francia una ventaja en la creación y suministro de baterías, el desarrollo de materiales y la gestión de su vida, que incluye el reciclaje y el reacondicionamiento.
Codirigido por el CNRS y el CEA, las actividades de investigación de PEPR se articulan en torno a tres ejes: sistemas de gestión para nuevas generaciones de baterías, el desarrollo de nuevas herramientas de caracterización y simulación para realizar investigaciones, y la investigación en torno a las químicas utilizando todo sólido y post-Li. -Tecnologías de iones. Una batería de nueva generación debería reemplazar el electrodo líquido por un componente metálico, llamado inorgánico, que facilite la difusión de los iones de litio sin que se muevan de un electrodo a otro en el líquido. Este método permite que las baterías se calienten menos y multipliquen su potencia por dos.
El PEPR se dotó con una dotación de 45,66 millones de euros a 7 años. Se enmarca en Francia 2030, el plan quinquenal, lanzado en 2021 con un presupuesto de 54.000 millones, para reactivar la economía tras la crisis sanitaria, fomentando la competitividad industrial, las tecnologías de futuro y la reindustrialización del país.
Gracias a esta dotación, las dos instituciones ya pueden financiar cinco proyectos de gran envergadura. También permitirá subvencionar hasta 15 millones de euros a los ganadores de una convocatoria de proyectos lanzada el pasado mes de noviembre. Los candidatos tienen hasta el 31 de enero para presentar su solicitud y, si ganan el concurso, sus innovaciones se unirán a las actividades de investigación que ya están en marcha, a partir del verano de 2023.
Los proyectos que ya están en marcha son:
- LIMASA tiene como objetivo desarrollar prototipos de baterías confiables utilizando tecnología de estado sólido.
- Hipohybat tiene como objetivo desarrollar dos tecnologías de batería de alta densidad de potencia. La primera tecnología se basa en baterías de iones de sodio y tiene como objetivo hacerlas más duraderas, seguras y potentes con un menor consumo. La segunda tecnología tiene como objetivo desarrollar baterías híbridas capaces de recargarse en un minuto con una vida útil de más de 50.000 ciclos. En comparación, las baterías de los coches eléctricos actualmente tienen una vida útil de entre 800 y 1500 ciclos de recarga, y los mejores smartphones pueden soportar 5000 cargas y 5000 descargas.
- SENSIGA se enfoca en el campo del diagnóstico de baterías para mejorar su calidad, confiabilidad y vida útil. Concretamente, este proyecto está orientado principalmente a la vida útil de las baterías para poder reciclarlas en el momento adecuado.
- TORMENTA ABIERTA deberá acelerar el estudio de futuras generaciones de baterías transfiriendo la metodología y el know-how existente entre los diferentes laboratorios.
- HOMBRE MURCIÉLAGO quiere introducir la inteligencia artificial en el desarrollo de baterías de próxima generación. Las IA darán respuestas cuando las experiencias no sean suficientes. Los investigadores están trabajando en tres objetivos específicos: detección optimizada de electrolitos de alto rendimiento, comprensión de las reacciones químicas y optimización del proceso de fabricación de baterías en los próximos años.
Patrice Simon (CNRS) y Hélène Burlet (CEA), a cargo de pilotar el plan, muestran su entusiasmo, ” Este PEPR representa una gran oportunidad para fortalecer los lazos dentro de la comunidad de investigadores que trabajan en el campo de las baterías innovadoras. La animación científica que se nos ha confiado favorecerá las sinergias entre los distintos proyectos para producir el máximo de conocimiento en poco tiempo. »