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Los asesores de Kamala Harris han contactado con importantes empresas de criptomonedas para convocar reuniones con el fin de “reiniciar” las relaciones entre su partido demócrata y un sector que se ha revelado como un importante partidario de Donald Trump, su rival para la presidencia de Estados Unidos.
Los miembros del equipo del vicepresidente se han puesto en contacto con personas cercanas a las empresas de criptomonedas para reunirse en los últimos días, dijeron cuatro personas con conocimiento del asunto. Entre ellas se incluyen la importante plataforma de intercambio Coinbase, la empresa de monedas estables Circle y el grupo de pagos blockchain Ripple Labs, dijeron dos de las personas.
La oficina del vicepresidente y la campaña de Harris se negaron a hacer comentarios. Ripple y Coinbase se negaron a hacer comentarios. Circle no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.
La propuesta de Harris a las empresas de criptomonedas se produce en un momento en el que Trump disfruta de un fuerte apoyo del sector. El expresidente, que en su día fue un escéptico declarado de las criptomonedas, ha dado su apoyo a la industria y pronunciará el discurso inaugural en una conferencia sobre Bitcoin en Nashville el sábado.
Es probable que los grupos de criptomonedas sean una fuente importante de financiación para los candidatos en las elecciones: el súper PAC pro-criptomonedas Fairshake ha recaudado más de 200 millones de dólares de patrocinadores como Coinbase, Ripple y Andreessen Horowitz, según documentos presentados.
Las personas que asesoran a la campaña de Harris en cuestiones comerciales dijeron que la decisión de volver a conectarse con la industria de las criptomonedas tenía poco que ver con atraer nuevas contribuciones electorales. Dijeron que el objetivo era, en cambio, construir una relación constructiva que, en última instancia, establecería un marco regulatorio inteligente que ayudaría al crecimiento de toda la clase de activos.
Los asesores externos de la campaña dijeron que Harris quería cambiar la percepción que tienen muchos altos ejecutivos de las corporaciones estadounidenses de que los demócratas están en contra de las empresas. Una persona dijo que su campaña estaba usando el cambio de liderazgo en la candidatura demócrata como una oportunidad para restablecer las relaciones con la industria tecnológica, que se ha sentido en la mira de la administración Biden, particularmente en cuestiones antimonopolio.
El mensaje subyacente que Harris quiere transmitir es que los demócratas son “pro-empresas, empresas responsables”, dijo una persona cercana a su campaña.
Harris pretende recuperar a aquellos miembros de la comunidad tecnológica, muchos de ellos en su estado natal de California, que se han alejado del partido en protesta por la amenaza de nuevos impuestos o la regulación de su industria.
A principios de este mes, los inversores de capital riesgo Marc Andreessen y Ben Horowitz anunciaron que respaldarían a Trump en las elecciones, tras haber apoyado anteriormente a varios candidatos demócratas. Su firma, Andreessen Horowitz, afirma ser el mayor inversor en criptomonedas del mundo y ha recaudado unos 8.000 millones de dólares para invertir en el sector.
Cuando anunciaron su apoyo a Trump, los dos capitalistas de riesgo se lanzaron contra la Casa Blanca del presidente Joe Biden y la Comisión de Bolsa y Valores de Gary Gensler. “Nos han combatido a cada paso y han utilizado medios muy nefastos”, dijo Horowitz en ese momento. “Están bombardeando la industria”.
Algunas empresas de criptomonedas tienen la esperanza de que Harris sea más comprensiva con ellas. “El hecho de que esté dispuesta a escuchar es algo muy importante. Con Biden ni siquiera se podía conseguir una reunión… Ha dejado a la gente con una visión muy mala de la administración Biden”, dijo un ejecutivo de una empresa de criptomonedas.