Los mayores fabricantes de semiconductores, como Taiwan Semiconductor Manufacturing Company (TSMC), se enfrentan a la amenaza de la escasez de agua. Esto es lo que indica un estudio publicado a finales de febrero por S&P Global. Según la firma de análisis, la escasez de agua podría provocar un aumento drástico…
Los mayores fabricantes de semiconductores, como Taiwan Semiconductor Manufacturing Company (TSMC), se enfrentan a la amenaza de la escasez de agua. Esto es lo que indica un estudio publicado a finales de febrero por S&P Global. Según la firma de análisis, la escasez de agua podría provocar un aumento drástico del precio de los componentes electrónicos.
Agua: recurso clave de la industria de los semiconductores
El agua es un elemento esencial para la industria de los semiconductores. Tratada por empresas del sector para alcanzar un alto nivel de pureza, el agua se utiliza para enjuagar las obleas producidas por las fábricas durante cada paso de la fabricación de componentes electrónicos. Cuanto más avanzado es el semiconductor, más pasos tiene el proceso y más agua se consume.
Según los datos recopilados por S&P Global, el consumo de agua de todos los fabricantes de chips equivale al de una ciudad de aproximadamente 7,5 millones de habitantes, la población de Hong Kong. La de TSMC habría aumentado un 35% entre 2015 y hoy. Hace nueve años, el líder mundial en semiconductores dominó la tecnología de grabado de 16 nanómetros, considerada la más avanzada en ese momento. Hoy está preparado para utilizar técnicas para obtener componentes grabados en 2 nm.
Con la mejora de las tecnologías de grabado y el aumento del número de fábricas, “ La seguridad del agua será un factor cada vez más importante para los perfiles crediticios de las empresas de semiconductores. » especifica S&P Global. Una mala gestión de los recursos hídricos podría perturbar las operaciones de un sector, dañar su desempeño financiero y potencialmente dañar su relación con sus clientes.
Además, estas empresas deben tener en cuenta el cambio climático. Favorece la aparición de sequías, mientras que las precipitaciones son cada vez menos frecuentes. Por tanto, el fenómeno limita la capacidad de los fabricantes de chips para gestionar la estabilidad de su producción. Entre octubre de 2020 y junio de 2021, la sequía de Taiwán obligó a las autoridades a exigir a su industria tecnológica que redujera su consumo de agua hasta en un 20%. Un verdadero golpe para TSMC, ya debilitado por la pandemia de Covid-19 en ese momento.
Dado su dominio en el mercado de chips avanzados, esta escasez de agua puede alterar la cadena de suministro global. Sin embargo, dada su posición predominante, el grupo taiwanés tiene la posibilidad de “ bloquear la demanda final y compensar la caída de las ventas unitarias con aumentos de precios “. Para seguir generando beneficios, S&P Global teme que la empresa se centre únicamente en la producción de chips de alto rendimiento, en detrimento de componentes con tecnologías maduras, que sin embargo son ampliamente explotadas por la industria del automóvil, la aeronáutica y los grandes dispositivos electrónicos. audiencia.