Es muy importante que la antigua fragua de Zweeloo no sucumba al deterioro y al abandono, sino que se conserve para el futuro. Así lo afirma la asociación nacional de patrimonio Bond Heemschut, que se compromete a renovar el edificio de De Wheem.
Así lo informa Frans Schouten, de la asociación de patrimonio, en respuesta a la noticia de esta semana en RTV Drenthe. El propietario, Henk Vaessen, lleva años planeando convertir la antigua fragua en un pequeño museo, pero hasta ahora no ha podido despegar. El iniciador ha presentado su candidatura a varios fondos, pero hasta ahora sin éxito.
Schouten: «Ahora queremos echar una mano con nuestra experiencia, porque es importante que estos lugares se preserven para el futuro». La fragua no se utiliza desde hace tres años. En 2021 murió Lucas Masselink, el último herrero de Zweeloo. Desde entonces, la fragua y todo lo que hay en ella permanece intacto. Schouten: «Hace años tuvimos una situación similar con un antiguo taller de vagones en Leiden. También pudimos salvarlo».
La asociación patrimonial no dispone de mucho dinero para la tan necesaria renovación del edificio, pero afirma que puede ayudar de otra manera. «En cualquier caso, queremos ponernos en contacto con el municipio y la provincia y ayudarles a presentar solicitudes a otros fondos y a particulares. Lo que también podemos hacer es elaborar un informe que destaque claramente la importancia histórico-cultural de la antigua ferrería».
Bond Heemschut se pondrá en contacto con los iniciadores para elaborar un plan, afirma Schouten. «Sabemos mejor que nadie lo grande que puede ser la tarea de renovar un edificio así, pero también sabemos que vale la pena».
La antigua fragua de Zweeloo data del año 1896. Tres generaciones de Masselink trabajaron aquí como herreros en el pueblo. Vaessen y su esposa Gitta Masselink quieren utilizar la fragua como un pequeño museo, pero primero hay que ocuparse del edificio. La electricidad es francamente peligrosa, las vigas de soporte están sueltas o llenas de madera podrida, los herrajes de las ventanas han comenzado a expandirse debido al óxido y se pueden ver grietas en las paredes en varios lugares. Y además hay amianto en el tejado.
La política local también exige renovación. Según BBC2014, la facción más grande del consejo municipal de Coevorden, esto se podría hacer con dinero del llamado fondo de reestructuración. El concejal Steven Stegen prometió a principios de este mes que también entablaría conversaciones con la provincia de Drenthe para ver si habría dinero adicional disponible.