Según la asociación, Tirol tiene 7.000 monitores de esquí y otras tantas personas que enseñan “ilegalmente”. Este último grupo a menudo no cumple con los requisitos que los instructores deben cumplir por ley, dice el director Christian Abenthung a ORF. Dice que se trata de personas de toda Europa.
Abenthung dice que está principalmente preocupado por los riesgos de seguridad. El mal tiempo, por ejemplo, puede crear situaciones en las que los profesores no calificados y sus alumnos necesiten ayuda para llegar al valle, según el director. Según él, los controles están destinados principalmente a informar a las personas sobre los peligros. Si las personas son “irrazonables”, se considerarán medidas adicionales.
Las lecciones en Tirol están todas reservadas esta temporada, dice Abenthung. Los medios austriacos escribieron recientemente que muchas escuelas de esquí en el área de deportes de invierno, que es popular entre los belgas, están luchando contra la escasez de maestros, incluso en temporada alta. Esto se debe en parte a que se capacitó a menos personas como instructores durante la pandemia del coronavirus.