Koksijde tiene razón en lo que respecta al impuesto a los propietarios de segundas viviendas. El Tribunal de Apelación de Gante dictamina que las segundas residencias provocan una escasez de viviendas asequibles. Y que el municipio sólo puede imponer un impuesto a las segundas viviendas, sin vulnerar el principio de igualdad. Así lo afirmó el alcalde Vanden Bussche.