En un accidente durante una carrera, un talento resulta gravemente herido. La ayuda llega demasiado tarde.
El deporte ecuestre inglés está de luto: el jockey Keagan Kirby ha muerto. Según informa el periódico “Sun”, Kirkby cayó de su caballo el domingo durante una carrera de caballos en Kent y murió a causa de sus graves heridas. Se llamó a un helicóptero de rescate, pero ni siquiera esta ayuda habría podido ayudar.
El joven de 25 años formaba parte de la caballeriza del renombrado entrenador Paul Nicholls desde 2019, aparentemente era considerado un gran talento joven y ya había ganado varios premios a lo largo de su carrera. El propio Nicholls expresó conmoción y emoción por la muerte de Kirkby después del accidente. “La vida es muy dura a veces y las victorias no tienen ninguna importancia en comparación con lo que pasó hoy”, escribió Nicholls en X. “Uno de nuestros mejores, uno de nuestros más duros trabajadores perdió la vida hoy. Estamos todos en shock. Mis pensamientos están con todos sus amigos y familiares.”
Nicholls continuó explicando en otra publicación lo que hizo que Kirkby se destacara: “Le apasionaba el deporte ecuestre y montaba Afadil (su caballo, nota del editor) todos los días. Lo último que me dijo fue el viernes, fue: ‘Jefe, Afadil ganará mañana”. Qué razón tenía. Descansa en paz, Keag, todos te extrañaremos muchísimo”.
El “Injured Jockey’s Fund”, una institución que brinda principalmente atención médica y psicológica a los jinetes lesionados, anunció más información: el caballo de Kirkby se había escapado de un obstáculo. Un equipo de médicos presentes en el lugar prestó inmediatamente primeros auxilios, sin éxito.