El otro atleta favorito, el alemán, tiene que sobrevivir en una competición reñida. No basta con estar en la cima, pero hay otra medalla.
Malaika Mihambo ganó la medalla de plata olímpica en salto de longitud. Tres años después de su triunfo en Tokio, la bicampeona del mundo saltó esta vez a la plata con 6,98 m. Mihambo sólo tuvo que admitir la derrota ante la vicecampeona mundial y nueva campeona olímpica Tara Davis-Woodhall de Estados Unidos (7,10). El bronce fue para su compañera Jasmine Moore (6,96).
Las otras titulares alemanas, Mikaelle Assani y Laura Raquel Müller, no pudieron clasificarse para la final en Saint-Denis, cerca de París. El decatleta Leo Neugebauer consiguió la plata, la única medalla alemana en atletismo hasta la fecha.
Mihambo consiguió su título europeo hace dos meses en Roma con la mejor marca del mundo de 7,22 metros, lo que la convirtió también en la favorita para los Juegos Olímpicos. Una infección por corona ralentizó la preparación de la tres veces atleta del año, pero aun así se recuperó a tiempo. Después de dos intentos fallidos, Mihambo sólo logró la clasificación en el Estadio de Francia con 6,86 metros en el último salto.
En la final, ante 70.000 espectadores, entre ellos el rapero Snoop Dogg y la estrella de gimnasia Simone Biles, Mihambo comenzó con cautela. En las gradas cercanas a la instalación de salto de longitud, la corredora de obstáculos Gesa Felicitas Krause también vio dos intentos válidos en 6,77 metros y 6,81 metros, pero la competición empezó con más fuerza.
Mihambo había retrocedido un metro su carrera para llegar al tablero mejor que en la clasificación. Allí saltó 6,86 metros en el momento decisivo y regaló otros 30 centímetros.
Davis-Woodhall fue el primero en superar la marca de los siete metros en la segunda ronda, aterrizando a 7,05 metros. Mihambo se acercó entonces con 6,95 metros, el siguiente intento fue inválido. La líder Davis-Woodhall volvió a mejorar cinco centímetros, Mihambo se acercó a los siete metros y consiguió su segunda medalla olímpica. “Vamos”, dijo antes de su último intento, pero la oportunidad de conseguir el oro como en Tokio no funcionó: Mihambo corrió.