Para Italia es el día de la verdad, el examen más temido. De hecho, la calificación de la agencia estadounidense se espera a última hora de hoy, viernes 17 de noviembre. Moody’s . Podría confirmar el juicio de las demás agencias, dejando el panorama difícil pero estable. Pero Italia llega a la prueba con perspectivas negativas y valoración actual Baa3 está justo por encima del nivel umbral de inversión, grado de inversión. Si bajara, estaría en el llamado nivel”basura«, «basura». El Gobierno Meloni llega a la reunión con una ley presupuestaria prudente en términos numéricos, cuidadosa para evitar que algunas de las partidas más importantes – como las pensiones – afecten a las cuentas.
¿Qué puede pasar en caso de degradación?
Moody’s seguramente tendrá la opción no sólo un valor político, pero también financiero. Los efectos de un posible recorte los describe un estudio de Barclays. Si la calificación de Italia cayera por debajo del grado de inversión, la propagación entre el BTP y el Bund alemán, que actualmente ronda los 175, «podría poner a prueba» el umbral de los 250 puntos básicos. Y en cualquier caso, incluso si la agencia confirmara la votación sobre Italia, Barclays ve poco margen de maniobra para el país, lo que lo haría «vulnerable a los shocks y a las fluctuaciones del sentimiento de los inversores».
Exámenes anteriores
Las tres primeras calificaciones, realizadas respectivamente por S&P, Dbrs Y Fitch Han dejado sin alterar la calificación y también las perspectivas de la deuda soberana de Italia, a pesar de la desaceleración de la economía destacada en los distintos informes. En concreto, el viernes 20 de octubre. Calificaciones globales de S&P confirmó la calificación “BBB” para Italia con perspectivas estables. viernes 27 de octubre Dbrs dejó la calificación “BBB alta” sin cambios con una tendencia estable. La agencia será el viernes 10 de noviembre. Fitch mantuvo su calificación “BBB” con perspectiva estable. Fitch también subrayó que el actual ejecutivo puede contar con una «mayoría parlamentaria más estable que las administraciones anteriores», incluso si se enfrenta a «una presión política considerable para mantener mejor sus compromisos electorales». Precisamente así lo subrayan el ministro Adolfo Urso y otros miembros de la mayoría que reconocen la solidez de la economía y de la coalición que gobierna el ejecutivo.
Predicción
Los analistas de Unicredito dijeron estar convencidos de que el juicio sobre la calificación de Italia será confirmado en lo que será un acontecimiento «cuidadosamente evaluado por los inversores». «Los datos históricos y las proyecciones – escribe Unicredit en un informe reciente – parecen coherentes al menos con una confirmación de la sentencia, también a la luz de la resistencia demostrada por Italia a las crisis recientes, como la energética»; A favor de la confirmación también están «las recientes mejoras» en la implementación del Pnrr, las noticias «positivas» sobre la situación política, «las mejoras» en los indicadores de la balanza comercial exterior y «los avances» en la solidez del sistema bancario. Por supuesto, los mismos analistas señalan la difícil previsibilidad de las calificaciones de Moody’s. El presidente estadounidense, Joe Biden, sabe algo al respecto y vio confirmada su calificación «triple A» pero, sorprendentemente, la perspectiva pasó de estable a negativa.