La expulsión masiva de funcionarios rusos de las embajadas en toda Europa se aceleró el martes en medio de la indignación por la agresión de Moscú en Ucrania y la creciente preocupación por los espías que se hacen pasar por diplomáticos.
Italia, España, Dinamarca y Suecia anunciaron la expulsión de un total de 73 diplomáticos rusos, siguiendo movimientos similares en los últimos días por parte de Alemania, Polonia y Eslovaquia.
Las medidas elevaron el número de diplomáticos rusos expulsados de la UE desde la invasión de Ucrania a al menos 293, según cálculos del Financial Times.
Las acciones representan un esfuerzo adicional para aislar a Rusia a nivel internacional y cerrarán más canales de comunicación entre Moscú y la UE.
Las últimas expulsiones se produjeron cuando los ministros de finanzas de la UE se reunieron en Luxemburgo para discutir la imposición de sanciones aún más severas a Moscú tras el aparente asesinato de civiles ucranianos por parte de sus tropas en los suburbios de Kiev.
El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, se prepara para dirigirse al Consejo de Seguridad de la ONU sobre las supuestas atrocidades más tarde el martes. Dmytro Kuleba, ministro de Relaciones Exteriores de Ucrania, dijo que había hablado con António Guterres, secretario general de la ONU, y lo instó a hacer uso de mecanismos «para recopilar evidencia y hacer que los criminales de guerra rusos rindan cuentas».
Luigi di Maio, ministro de Relaciones Exteriores de Italia, dijo durante un viaje oficial a Berlín que Roma había calificado a 30 diplomáticos rusos como personas no deseadas.
«Esta decisión . . . fue necesario por razones vinculadas a nuestra seguridad nacional”, dijo Di Maio citado por la agencia oficial de noticias italiana, ANSA. Agregó que las expulsiones fueron impulsadas por “la actual situación de crisis provocada por el injustificado ataque a Ucrania por parte de la Federación Rusa”.
Dinamarca anunció por separado que expulsaría a 15 diplomáticos rusos, y Jeppe Kofod, ministro de Relaciones Exteriores, los calificó de «una amenaza para nuestra seguridad nacional».
“Es de interés mutuo mantener los lazos diplomáticos, pero no aceptaremos el espionaje ruso en suelo danés”, escribió Kofod en Twitter.
Suecia también anunció la expulsión de tres diplomáticos rusos del país. Un alto funcionario de seguridad sueco dijo el año pasado: «Sabemos que uno de cada tres diplomáticos rusos trabaja bajo lo que llamamos ‘cobertura diplomática’ y en realidad trabaja para uno de los servicios de inteligencia de Rusia».
Los diplomáticos rusos rechazados en sus puestos en los últimos días incluyen 40 de Alemania el lunes, 45 de Polonia y 35 de Eslovaquia.
Después de que se anunciara la expulsión de diplomáticos de Italia, un funcionario del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia dijo que Moscú “daría una respuesta correspondiente”, informó la agencia de noticias rusa Tass.