El parlamento italiano ha aprobado un aumento de las multas por desfiguración de monumentos. Las multas más altas deberían cubrir los costes de limpieza. En los últimos meses, activistas medioambientales han desfigurado varios monumentos en Italia.
Las personas que desfiguran un monumento en Italia pueden recibir una multa de hasta 40.000 euros. Si se destruye un monumento, las multas pueden ascender a 60.000 euros. Actualmente la multa máxima es de 15.000 euros.
El aumento se produce tras varios incidentes en los que activistas medioambientales arrojaron pintura sobre monumentos italianos. En los últimos meses, la Fontana de Trevi en Roma, el Palazzo Vecchio en Florencia y la Basílica de San Marcos en Venecia han sido desfiguradas.
La modificación de la ley también estipula que el Ministerio de Cultura puede utilizar el dinero de las multas para limpiar y, si es necesario, reparar los monumentos. “Es bueno que ya no sean los italianos los que tengan que pagar estos costes, sino los responsables de estas acciones”, afirmó el ministro de Cultura italiano, Gennaro Sangiuliano.