El parque de bungalows Wico en Schoonoord no es en absoluto adecuado como parque de vacaciones recreativo. La experiencia recreativa es francamente pobre, sobre todo porque faltan por completo las instalaciones necesarias. Wico tampoco parece adecuado como parque recreativo para segundas viviendas.
A esta conclusión llegó la agencia de investigación Ruimte en Vrije Tijd tras el llamado análisis de vitalidad del tan discutido parque de bungalows de más de ocho hectáreas en Slenerweg. El parque, con 67 bungalows, es residencia permanente desde hace unos sesenta años. Una espina clavada para el municipio de Coevorden, que ya había indicado que quería poner fin a esto. El año pasado, el municipio anunció que pondría fin a la tolerancia. A principios de este año se acordó suspender la ejecución mientras las investigaciones estuvieran en curso.
La alternativa a la residencia permanente sería darle al parque una función recreativa. Pero este nuevo estudio, cuyos resultados se han presentado ahora, muestra que se trata de una historia difícil. Wico obtiene una puntuación “muy negativa” en calidad de ocio. El parque está etiquetado como no vital y la experiencia recreativa es deficiente.
Esto último, según los investigadores, principalmente porque faltan las instalaciones necesarias. Por ejemplo, no existe una zona de recepción central ni recepción ni ningún otro tipo de instalaciones. Hay un edificio de catering, pero está abandonado y en ruinas y lleno de mantenimiento atrasado. Los bungalows en sí son anticuados, pero parecen estar bien mantenidos. Según los investigadores, en términos de diseño, el parque se parece más a una pequeña zona residencial.
Lo que los investigadores también señalan es que, si se optara por el uso recreativo, habría que imponerlo. Además, entonces son necesarias medidas específicas. “La revitalización de Bungalow Park Wico requiere una actitud muy activa y a largo plazo por parte del municipio, con un gran riesgo de que un futuro recreativo resulte inviable”.
Aunque legalmente es posible que el municipio imponga la residencia permanente, según los investigadores no está claro qué está sucediendo y cuál es la dirección deseable en vista de la dimensión humana y del desarrollo social. “Aparte de la dimensión humana de tales medidas, existe la posibilidad de que estos residentes recurran al ámbito social del municipio, creando otro problema más”. El propietario del parque indicó anteriormente a RTV Drenthe que en el parque encuentran regularmente gente que en realidad “vive con un pie bajo el puente” y no tiene adónde ir.
Esto deja claro ahora que el valor recreativo del parque es muy pequeño. Ahora corresponde al consejo municipal de Coevorden determinar qué debería pasar con Wico. Janneke Lampe, propietaria del parque: “Efectivamente, esa es la pregunta clave ahora, porque este estudio muestra lo que aquí no es posible, pero no indica lo que sí es posible”.
Para ella, todo sigue igual en este parque. Esto es también lo que más desean los residentes, como reveló a principios de este año un estudio realizado por un grupo de trabajo formado por residentes y propietarios de bungalows. Lampe: “Lo que también se podría hacer es que decidamos juntos que convertiremos esto en una especie de piloto, en el que le daremos al parque un doble propósito: residencia permanente y recreación”.
El consejo municipal de Coevorden todavía está considerando lo que sucederá a continuación, informa el consejo en una carta al consejo municipal. “Discutiremos estos resultados con el grupo de trabajo y luego decidiremos los pasos a seguir”.