Los nerazzurri no pueden redimirlo, pero hay márgenes para negociar una nueva cesión: las cartas sobre la mesa
Este partido no se juega solo por voluntad mutua porque de lo contrario Romelu Lukaku ya estaría seguro de hacer temblar también a San Siro el próximo año. De hecho, el belga no ve más que a los nerazzurri y al Inter también le gustaría complacer su deseo de echar raíces en el Milán.