Texto claro de Uli Hoeneß: El presidente de honor del FC Bayern criticó la destitución de Julian Nagelsmann del campeón récord a principios de año. Al mismo tiempo, criticó duramente al despedido director deportivo Oliver Kahn.
En el programa de entrevistas “Sonntags-Stammtisch” de BR, Hoeneß inicialmente destacó explícitamente que no fue él quien despidió a Julian Nagelsmann, sino el club. Y esto “no es necesariamente prudente”, se quejó el presidente honorario.
Cuando se le preguntó qué salió mal en el FC Bayern durante esta turbulenta temporada la pasada temporada, Hoeneß explicó que él también había corregido sus propios errores: “Lo más importante es que, si quieres cambiar algo, empiezas por ti mismo y admites que los errores fueron ¡Y el nombramiento de Oliver Kahn como director general fue un gran error!”
Hoeneß quiere que el FC Bayern esté preparado para el futuro en seis o doce meses
Cuando se dio cuenta de que Oliver Kahn “no podía hacer eso, lo cambié junto con Karl-Heinz Rummenigge”, explicó Hoeneß, con vistas a la destitución de Kahn al final de la temporada 2022/23.
En unos “seis a doce meses”, según la estimación de Hoeneß, el FC Bayern podría tener “el personal que el futuro debería tener. Y luego Karl-Heinz Rummenigge y yo nos retiraremos un poco más”. Sin embargo, actualmente él y Rummenigge siguen involucrados en el negocio operativo, afirmó el presidente honorario.
Hoeneß cambia de opinión
Hoeneß admitió que ya no mantiene su antiguo mantra de que sólo un exfutbolista podía gestionar un club de fútbol de forma correcta y concienzuda. En el pasado, su opinión era diferente, ya que los antiguos profesionales aún no habían pensado en el final de sus carreras activas, a diferencia de hoy.
“Si alguien juega hoy al fútbol en el Bayern de Múnich durante diez años, ya no necesita trabajar en absoluto. Y si este jugador está dispuesto a trabajar doce horas al día, seis días a la semana cuando ya no lo necesita… “Eso es La gran pregunta. Oliver Kahn dijo recientemente en una entrevista que un director general no tiene que trabajar las 24 horas del día. A lo que respondí: “Pero deberían ser doce”, concluyó el presidente honorario con un golpe a Kahn.