El catálogo de construcción libre sigue creciendo. E incluye, con una esperada aclaración, otra pieza: la de pérgolas bioclimáticases decir, estructuras dotadas de una cobertura formada por lamas orientables, capaces de proteger de los agentes atmosféricos, como la lluvia o el sol.
La novedad llega con una de las enmiendas (reformulación de una propuesta de la Liga) votada el jueves 11 de julio por la Comisión de Medio Ambiente de la Cámara en la ley que convierte la Salvar el decreto de la casa (Decreto legislativo n. 69/2024, ponentes Dario Iaia, Fratelli d’Italia y Erica Mazzetti, Forza Italia). El texto, tras estas primeras mejoras, está destinado a sufrir otras modificaciones: entre otros, aún no se han abordado los capítulos sobre las tolerancias, las exigencias de habitabilidad de los edificios y el Save Milano (véase «Il Sole 24 Ore» del 12 de julio). El calendario incluye una sesión de votación el lunes por la tarde, luego el martes por la mañana y un cierre en la comisión, con vistas a llegar a la Cámara el miércoles.
Salvar Milán «intervención necesaria»
Erica Mazzetti de Forza Italia habla sobre Salva Milano. Explicando que se trata de “una intervención necesaria”, pero que hay que abordarla “sin perjudicar otras situaciones”. Se trata de un período de transición que, en los últimos borradores difundidos, todavía está mal definido y corre el riesgo de crear un vacío regulatorio de al menos seis meses, durante el cual se podrían bloquear nuevas obras. «Hasta que transcurra el plazo indicado – afirma -, ninguna administración expedirá un permiso de construcción». Alternativamente, “proponemos dejar todo sin cambios para la expedición de los documentos habilitantes hasta el final de los seis meses, para que no haya un vacío normativo preocupante”.
Volviendo a la libre construcción, la primera versión de la medida ya había revisado la lista, contenida en el Texto Refundido de la Ley de Construcción (Decreto Presidencial nº 380/2001), de obras que no requieren ningún permiso o comunicación para su realización. A ese catálogo se le había añadido una entrada específica, dedicada al universo de los toldos. Se trata de un ámbito en el que se ha acumulado considerable jurisprudencia en los últimos años, centrada en la identificación, caso por caso, de las autorizaciones necesarias para crear estos artefactos.
No a los espacios “permanentemente cerrados”
El objetivo de Salva casa, en este punto, fue aclarar, componiendo una lista amplia y precisa de obras que no requieren autorización; Hay que decir que muchos tienen dudas sobre la eficacia de dicha lista en términos de reducción de incertidumbres y litigios. En el interior, sin embargo, hay tiendas de campaña, toldos, toldos exteriores pero, hasta ahora, no se hablaba de las pérgolas bioclimáticas, es decir, aquellas estructuras equipadas con lamas orientables, diseñadas para proteger a las personas de los agentes atmosféricos. Estructuras en las que se han centrado muchas frases. La modificación aprobada establece que se podrán crear toldos pérgolas, incluidas las bioclimáticas, con toldo retráctil sin ninguna calificación.