Por Isabel Panqueque
Hace dos semanas, estudiantes de la Universidad de Augsburgo aparecieron en los titulares con una solicitud para los llamados Gloryholes (agujero en la pared para contactos sexuales anónimos). Sin embargo, fue rechazado. ¡Pero ahora Berlín hace lo mismo!
En una moción que se presentará el martes al parlamento estudiantil de la Universidad Humboldt, se dice que Berlín debería dar un buen ejemplo y hacer que los Gloryholes sean socialmente aceptables en todas las universidades alemanas. ¿Todavía está bien?
En concreto, se necesitan tres Glory Holes para el edificio de seminarios en Dorotheenstrasse 24. “La altura debe ser ajustable y debe haber manijas en la pared a las que puedas agarrarte”, dice en la solicitud. También debería haber luces regulables, rodilleras, “condones, toallitas para lamer, lubricantes y desinfectantes y toallitas”.
La propuesta de Berlín proviene de “Los Alcohólicos Autónomos”, una rama del partido satírico “El Partido”. Pero él podría ser ruidoso Sebastián Esten (22), el presidente del Círculo de Estudiantes Demócrata Cristianos (RCDS), todavía encontró aprobación…
“¡No pertenece a una universidad!”
“Esto no es algo que pertenezca a la universidad”, se queja Esten, pero enfatiza: “Pero tengo mucha fe en las otras listas. Por eso puedo imaginar que la solicitud será aprobada”.
Con 31 de los 60 votos del parlamento estudiantil, los agujeros de gloria estarían cerrados el martes y entonces habría que instalarlos…
Después de que se hiciera pública la propuesta de los Gloryholes, ya se había desatado una acalorada discusión en la Universidad de Augsburgo. Un empleado de la universidad dijo: “Los solicitantes están tan despiertos que no lo dicen en broma”.
Y el periódico “Ring Christian-Demokratischer-Studenten Augsburg eV” escribió en un comunicado que los agujeros gloriosos en una universidad eran “altamente escandalosos e inaceptables” y representarían una grave violación de las normas éticas y morales.