Fanatics, el comerciante estadounidense conocido por sus camisetas de fútbol americano, ha esbozado sus ambiciones de vender más camisetas de fútbol europeas, destacando el creciente interés estadounidense en el deporte más popular del mundo.
“El fútbol debería ser nuestro negocio número uno”, dijo al Financial Times Michael Rubin, el director ejecutivo multimillonario del minorista deportivo. “Estamos jugando a ponernos al día”.
Los socios de Fanatics incluyen la Liga Nacional de Fútbol Americano, las Grandes Ligas de Béisbol, la Asociación Nacional de Baloncesto y Nike, lo que permite que el grupo con sede en Florida fabrique y venda camisetas y otras mercancías.
La empresa, que espera generar 8.000 millones de dólares en ingresos este año, ya trabaja con algunos de los clubes más importantes de Europa, como el Paris Saint-Germain, el Manchester United, el Chelsea FC y el Bayern de Múnich. Rubin dice que ahora quiere hacer adquisiciones más allá de su mercado nacional para aumentar los ingresos de Fanatics del fútbol.
Las ambiciones de Rubin en el deporte muestran cómo hay más formas para que las empresas ganen dinero con el hermoso juego más allá de adquirir clubes. Los inversores estadounidenses estuvieron detrás de la adquisición del Chelsea FC por 2.500 millones de libras esterlinas, la adquisición del campeón italiano AC Milan por 1.200 millones de euros y la compra del equipo francés Olympique Lyonnais por 800 millones de euros.
Fanatics se valoró en 31.000 millones de dólares en una recaudación de fondos de 700 millones de dólares liderada por Clearlake Capital en diciembre pasado, la firma de inversión que también lideró el acuerdo con Chelsea. La Liga Nacional de Fútbol Americano, la Liga Nacional de Hockey y la Liga Mayor de Béisbol también son accionistas de Fanatics.
Los comentarios de Rubin se producen poco después de que Fanatics adquiriera el minorista deportivo italiano y la empresa de comercio electrónico EPI, que espera que lo ayude con su impulso en el fútbol europeo.
Los clientes de EPI incluyen los clubes de fútbol italianos AC Milan, Inter Milan y Juventus, así como Atalanta BC, Bologna FC, ACF Fiorentina, SS Lazio y la Federación Italiana de Fútbol, lo que amplía la posición de Fanatics en Europa.
Fanatics compró EPI, que emplea a 150 personas, a un fondo de capital privado administrado por Quadrivio Group por una suma no revelada. EPI es la primera adquisición de Fanatics en Europa desde que compró el minorista en línea con sede en el Reino Unido Kitbag en 2016.
Fanatics ha pasado de ser principalmente un minorista de productos de terceros a una empresa que también puede fabricar productos por sí misma. La capacidad de producir y distribuir productos en particular significa que puede responder rápidamente cuando un atleta en particular se desempeña bien y los fanáticos acuden en masa para comprar su equipo.
La compañía también reforzó su posición en coleccionables mediante la adquisición del negocio de cromos Topps el año pasado, y está construyendo una división de apuestas.
Rubin, que ha vendido de todo, desde semillas de hortalizas hasta equipos de esquí y artículos deportivos, vendió el grupo de comercio electrónico GSI, que incluía a Fanatics, al sitio de subastas eBay en 2011 por 2.400 millones de dólares. Más tarde volvió a comprar la marca Fanatics para centrarse en el mercado deportivo.
“Hoy, la NFL es nuestro negocio más grande, el béisbol es nuestro segundo negocio más grande, la universidad es nuestro tercer negocio más grande, y luego la NBA y luego el fútbol mundial”, agregó.