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Giorgia Meloni ha advertido que Ursula von der Leyen sólo tiene una “mayoría frágil” para un segundo mandato al frente de la Comisión Europea, a menos que un acuerdo para distribuir los principales puestos del bloque tenga en cuenta las demandas de Roma.
Meloni habló antes de una cumbre de la UE el jueves que decidirá la alineación de los altos cargos. La primera ministra italiana criticó duramente a un grupo de seis líderes centristas de la UE por sellar un acuerdo que por segunda vez la excluyó.
Meloni calificó el consenso alcanzado sin sus propios Conservadores y Reformistas Europeos (ECR) de extrema derecha como “un error” y advirtió que los nominados estaban “destinados a tener dificultades en la legislatura europea”.
Von der Leyen necesita asegurarse el apoyo de los 27 líderes de la UE y luego una mayoría en el Parlamento Europeo para permanecer en el cargo. El ECR se convirtió en el tercer grupo más grande en la legislatura de la UE después de las elecciones de principios de este mes.
Las feroces críticas del líder italiano se produjeron un día después de que los funcionarios que representan a los tres grupos políticos centristas de Europa acordaran los candidatos para los principales puestos del bloque en negociaciones en las que Meloni no participó.
Junto con von der Leyen, la lista incluye al ex primer ministro de Portugal, António Costa, un socialdemócrata, como próximo presidente del Consejo Europeo y al primer ministro liberal de Estonia, Kaja Kallas, como jefe diplomático del bloque.
La exclusión de Meloni marca la segunda vez que ha sido marginada, después de que los líderes que representan a los mismos tres grupos centristas, incluidos el francés Emmanuel Macron y el alemán Olaf Scholz, propusieron nombres en una reunión a puertas cerradas antes de una cumbre informal a principios de este mes.
Un diplomático de la UE dijo que el proceso parecía “tener la intención política de querer demostrar que [Meloni] no es central como fuerza política”.
Hablando en el Bundestag el miércoles, Scholz dijo que esperaba un rápido acuerdo entre los líderes europeos sobre el trío de nominados.
«Estos son buenos nombramientos y una decisión clara para un buen futuro europeo». Dijo Scholz. “Tengo muchas esperanzas de que alcancemos un acuerdo al respecto en la cumbre de la UE. No podemos permitirnos ningún punto muerto en tiempos tan difíciles. La gente no quiere ver una disputa por el empleo: quiere ver que sus instituciones europeas funcionen rápidamente”.
Sin embargo, Meloni ha prometido luchar contra la “conventio ad exclusionendum” de Europa (o toma de decisiones excluyente) y seguir buscando un puesto influyente en la comisión para Italia.
«Hemos pedido y volveremos a pedir un cambio de ritmo político en línea con el mensaje dado por las encuestas», afirmó.
Meloni señaló que el grupo ECR había superado al grupo liberal Renew de Macron como la tercera familia política más grande en el Parlamento Europeo e históricamente se le habría concedido voz en la alineación para los tres puestos principales.
Acusó a sus colegas líderes europeos de cambiar el proceso de manera antidemocrática porque “el tercer grupo hoy es un grupo que no gusta a los demás”.
Juntos, los votos del Partido Popular Europeo de centroderecha, los socialdemócratas y los liberales darían en teoría a von der Leyen unos 410 escaños, por encima de la mayoría de 361 requerida para un segundo mandato. Pero históricamente, alrededor del 10 por ciento de los legisladores europeos desertan del voto secreto, lo que dejaría un estrecho margen para la reelección de von der Leyen.
El apoyo de los 24 eurodiputados del partido Hermanos de Italia de Meloni proporcionaría un colchón más cómodo para von der Leyen. Pero se cree que el precio del apoyo de Meloni es una cartera económica de alto nivel, algo que también busca su némesis Macron.
De camino a Bruselas, Meloni dijo que trabajará “para garantizar que nuestra nación esté mejor representada en los puestos más altos de la Unión Europea”.
Información adicional de Guy Chazan en Berlín y Giuliana Ricozzi en Roma