Sobre el impuesto a los superricos, “estamos a favor, pero necesitamos un buen debate sobre un principio que no debe ser cuestionado: la propiedad”. Así lo afirmó el ministro Giancarlo Giorgetti al margen del G20 en Río de Janeiro. “Está claro – afirmó – que la decisión sobre cómo gravar, cuánto y cuándo corresponde a los Estados nacionales, no puede ser recuperada ni en el G20 ni en la ONU. Se trata de un límite preciso que muchos países han fijado y que no pretendemos derogar.”
Avanzando con los impuestos a las multinacionales
“Si buscamos un impuesto mínimo global” para los superricos, “tendríamos que hacerlo primero con las grandes multinacionales y, lamentablemente, el pilar uno del acuerdo multilateral está dramáticamente en problemas, bloqueado por India, China y, sensacionalmente, también por Australia. y por eso los americanos no dan luz verde”, añadió el Ministro de Finanzas. “Si faltan India, China y Estados Unidos, me parece claro que falta la base imponible. Por ello, hemos insistido, cada vez con menos esperanzas, en la implementación del primer pilar sobre la fiscalidad de las grandes multinacionales”.
Nuestra prioridad es el plan Mattei en África
“Italia tiene el plan Mattei. También reiteramos con el Banco Mundial, la concentración de nuestro interés estratégico en África, porque entre las muchas necesidades y requerimientos a nivel global, tenemos un interés específico en centrar el desarrollo en África, de manera coordinada, en el ámbito de nuestra Plan Mattei”, subrayó Giorgetti. “Así que hablamos de esto con el Banco Mundial – observó -. Hay voluntad de centrar la atención en aquellos tres o cuatro países en los que intervenir”.
Nos encontramos en una encrucijada respecto de los activos rusos.
El expediente sobre los beneficios adicionales de los activos rusos inmovilizados, “como bien nos han señalado los bancos centrales, es un terreno muy resbaladizo, donde hay un claro reparto político, pero donde debemos tener mucho cuidado con lo que hacemos, tanto bajo desde el perfil jurídico en sentido estricto, como desde el perfil reputacional en sentido amplio”, explica la ministra. “Creo que estamos cerca de una solución que pueda salvar estas dimensiones. Una vez más, hay dos opciones sobre la mesa a nivel europeo. El trabajo de la presidencia italiana del G7 ha conducido al penal, pero en este punto tenemos que entender si Europa puede avanzar hacia un nivel de unanimidad, y esto permitiría a los 27 países cambiar la regulación y hacer que este sistema perpetua, o en todo caso definida hasta el final de la guerra. O más bien – destaca – si tenemos que conformarnos con una renovación continua, como se hace con las sanciones periódicas (semestralmente, cada año o cada dos) que consiguen el mismo objetivo, pero que para los EE.UU. no son totalmente satisfactorias porque no ofrece este tipo de seguro definitivo que solicitan ante el Congreso. Entonces estamos en esta situación. Mucho dependerá de la actitud de Hungría, y lo veremos entre septiembre y octubre, dada la especial prisa por definir el marco antes de las elecciones americanas”.
Panetta: la solución italiana del G7 sobre los activos rusos es buena
“La solución que se encontró bajo la presidencia italiana sobre los beneficios adicionales de los activos rusos inmovilizados es mucho más razonable que las propuestas anteriores. Es una solución que no viola el derecho internacional y que encuentra los recursos necesarios para Ucrania, y por eso ha encontrado el acuerdo de los siete países”, destacó el gobernador del Banco de Italia, Fabio Panetta, al margen de la G20 en Río. “Es una solución que extrae recursos de activos rusos inmovilizados, especialmente en Europa, pero al mismo tiempo no crea un precedente de violación del derecho internacional”.