El temido parón del transporte por carretera italiano, proclamado a partir del próximo lunes 14 de marzo por las empresas de transporte por carretera a nivel nacional “por causas de fuerza mayor”, fue rechazado por la Comisión de Garantía por la huelga.
Con un comunicado, el Comisionado Delegado de la Comisión Alessandro Bellavista, frena sobre la posibilidad de iniciar la movilización.
La información enviada a Trasportiunito-Fiap, y a los Ministerios de Infraestructuras y del Interior señala el “incumplimiento del plazo de preaviso de 25 días” y se refiere a “la obligación de predeterminar la duración de la abstención”.
El anuncio de la protesta, en los últimos días, había suscitado temor por el bloqueo de mercancías, especialmente de productos alimenticios, y del suministro de combustible, tanto que en toda Italia -también por la alarma sobre posibles nuevas subidas- se produjo una carrera hacia la compra de pasta, azúcar, harina, aceite y arroz, con filas de coches en los surtidores de gasolina, con escenas reales de psicosis colectiva en Cerdeña, donde se han vaciado estanterías enteras en algunos supermercados y algunos repartidores se han quedado temporalmente sin combustible.
“Como ninguna organización sindical ha proclamado nada, no estamos hablando de una huelga sino de un cierre patronal anunciado por los propietarios de las pequeñas empresas de transporte – dice a Ansa el secretario general de Filt-Cgil Sardegna Arnaldo Boeddu – el problema del combustible caro está ahí. Es y se pueden compartir las razones de la protesta porque los inconvenientes se extienden a lo largo de la cadena de suministro hasta el consumidor final, pero se necesitan soluciones estructurales por parte del gobierno, comenzando con la reducción de los impuestos especiales. Además, en Cerdeña existe la particularidad de que todas las mercancías viajan por carretera y por tanto las subidas de precios son mayores. He aquí entonces que la Región puede poner en marcha algunos refrescos pero eso debe ir a empresas que apliquen correctamente las normas contractuales también en el ámbito de la salud y la seguridad de los trabajadores».