Filippo y el doble asalto al oro: la contrarreloj ya el sábado: “Sin errores, sólo un Radler en el cumpleaños…”
A los primeros Juegos Olímpicos de su vida, Río 2016, estos ocho años pasaron volando, Filippo Ganna llegó en el último momento, pescado como sus compañeros de cuarteto por la exclusión de los rusos, casi arrancado de la playa al estilo Alberto Contador antes del Giro de 2008. , luego ganado por el español. En Japón, hace tres años, nuestro gigante experimentó todas las emociones: la decepción de la contrarreloj, quinto a sólo 5” de la plata en un recorrido que no era el ideal para él, y la apoteosis del oro en la persecución por equipos. Para Ganna, los de París son los Juegos de la conciencia y de la madurez, de un doble desafío con el listón muy alto -la búsqueda de dos títulos, contrarreloj y un bis en la pista- cuyo primer acto tendrá lugar pronto, muy pronto. El piamontés, que mañana cumplirá 28 años, ha llegado a París y, junto con sus compañeros de la selección nacional y el entrenador Marco Velo, para minimizar los riesgos relacionados con el Covid, no dormirá en el Village sino en el Instituto Nacional de Jóvenes Aveugles, el más antiguo. instituto de ciegos de la capital francesa que es sede olímpica. Hoy es la primera prueba en el recorrido contrarreloj, el viernes no habrá ceremonia inaugural, y el sábado el desafío estelar con Remco Evenepoel y Joshua Tarling -en el Mundial 2023, el italiano fue plata, detrás del belga y por delante de El galés, a la espera de la comparación en la pista. “Persigo la perfección – confiesa Ganna – pero más que en mis rivales me centro en lo que puedo hacer”.