El primer ministro Mark Rutte y la ministra Sigrid Kaag (Finanzas) simpatizaron con la propuesta de GroenLinks y PvdA de pagar una asignación de energía única adicional de 500 euros a todos los que reciben beneficios de atención médica. Eso debería amortiguar un poco el dolor del aumento de los costos de energía.
“No diré sí y no no. Vamos a mirarlo seriamente”, dijo Rutte en el debate parlamentario sobre el Memorándum de Primavera el miércoles. Enfatizó que “no es fácil” arreglar eso este año y que hay que buscar la manera de pagar la medida.
“Analizamos la vida útil, la cobertura y el equilibrio”, dijo Kaag sobre la propuesta. Ambos ministros dejaron entrever que no habrá un plan detallado antes del verano. Probablemente se presente una propuesta en agosto, cuando el gabinete esté negociando el presupuesto para el próximo año.
A pesar de esta promesa tentativa, el líder de GroenLinks, Jesse Klaver, y el líder de la facción de PvdA, Attje Kuiken, querían más claridad.
Debido a que Rutte anunció que no se tomaría una decisión final durante el debate, Klaver propuso continuar el debate otro día. “Averigua qué queda por hacer”, fue su llamado.
La Cámara acordó mover el debate, como resultado de lo cual no se llegó a un juicio político final sobre el debate.
La asignación de otoño cuesta 2.300 millones de euros
GroenLinks y PvdA abogan por un “subsidio de otoño” para todos los que reciben un subsidio de atención médica “para remediar los problemas más agudos”. Esto significa que pueden optar todos los que ganen hasta 32.000 euros brutos al año, para los que tienen doble ingreso el límite es de 41.000 euros. Según sus propios cálculos, la medida costará 2.350 millones de euros.
Debido al límite de ingresos, la asignación es principalmente para los ingresos bajos y medios, los grupos que están o estarán más en problemas. La semana pasada, la Oficina Central de Planificación (CPB) advirtió que más de un millón de hogares sufrirán problemas financieros si los precios de la energía siguen siendo tan altos.
Klaver teme que este escenario más oscuro esbozado por la CPB ya se haga realidad en octubre. “Entonces toda esa gente caerá a través del hielo”.
El gabinete ya ha gastado un total de 6.400 millones de euros para compensar a los hogares por el aumento de los costos de energía. Estos incluyen un recargo energético de 800 euros para los ingresos más bajos, una reducción en la factura energética y una reducción en los impuestos especiales sobre el combustible.