Sin embargo, habrá una excepción para las llamadas ‘rebajas sucesivas de precios’, por ejemplo, para una prenda con un 20 por ciento de descuento y luego un 50 por ciento de descuento. En ese caso, el vendedor puede continuar refiriéndose al precio que fue el primero en descontar, para que los descuentos no se acumulen. También habrá una excepción para los productos perecederos, como los alimentos.
Según el ministro Micky Adriaansens (Asuntos Económicos), los empresarios se benefician de que el gabinete ahora haga algo sobre los precios engañosos. Como resultado, se ven menos afectados por la competencia desleal, según el ministro.