El texto de 15 páginas de “Bohemian Rhapsody” y la puerta del jardín de Mercurio también fueron rematados.
La subasta de la propiedad de Freddie Mercury comenzó la tarde del 6 de septiembre. El piano del líder de Queen fue la pieza central de la subasta. El piano de cola Yamaha G2, con el que el cantante compuso muchos de los éxitos del grupo, como “Bohemian Rhapsody”, fue subastado por unos dos millones de euros. De antemano, el precio de venta se estimó incluso en 3,5 millones de euros.
Todo el patrimonio de Mercury, así como su patrimonio de Kensington, pasó a manos de su confidente cercana Mary Austin. Más de 32 años después de la muerte del líder de Queen, Austin ahora vende sus artículos para el hogar en Sotheby’s en Londres. Una parte de las ganancias se destinará a la Fundación Elton John contra el SIDA. Sin embargo, no está claro qué parte de la suma prevista, que se estima asciende a casi 13 millones de euros, se donará.
Aparte del piano, la mayor parte de la colección se vendió por mucho más del precio esperado. Entre las 1.400 piezas subastadas se encontraba la puerta verde del jardín de Mercury, que los fans inmortalizaron con graffiti poco después de la muerte del músico. La pieza única recaudó 465.000 euros en lugar de los 30.000 euros estimados.
También formaba parte de la colección el manuscrito original de “Bohemian Rhapsody”, que, a juzgar por las notas manuscritas en los márgenes, originalmente debía llamarse “Mongolian Rhapsody”. Las 15 páginas del texto se compraron por 1,6 millones de euros, lo que supone casi 200.000 euros más de lo previsto.
La subasta también incluyó una lámpara de mesa Tiffany, un brazalete de serpiente de plata y un anillo de ónix y diamantes de Cartier. Este último fue un regalo de Elton John a Mercury y se vendió por el equivalente a unos 318.000 euros. Casi 70 veces la estimación original.
Muchos de los fans, así como el guitarrista de Queen, Brian May, no estaban entusiasmados con la próxima subasta. Anteriormente, el ex compañero de banda escribió en una publicación en las redes sociales: “Mañana los artículos y escritos personales más íntimos de Freddie, que han sido parte de lo que hemos compartido durante tantos años, pasarán por el martillo y serán subastados al mejor postor y entonces para siempre estar disperso. No puedo mirar. Es muy triste para nosotros, sus amigos más cercanos y su familia”.