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Francia repatriará a su embajador en Níger en las “próximas horas” y retirará a los 1.500 soldados que tiene allí para finales de año, mientras intenta poner fin a un enfrentamiento diplomático con la junta que tomó el poder en el país de África occidental en Julio.
El presidente Emmanuel Macron dijo en una entrevista en la televisión France 2 el domingo por la noche que había informado de las decisiones al presidente depuesto Mohamed Bazoum, que permanece bajo arresto domiciliario.
«Nuestro embajador y varios diplomáticos regresarán a Francia», dijo Macron.
«También pondremos fin a nuestra cooperación militar con las autoridades que efectivamente están en el poder, ya que ya no quieren luchar contra el terrorismo», dijo, añadiendo que Francia negociaría con las autoridades locales para garantizar una retirada de tropas «tranquila y ordenada».
No hubo una reacción inmediata al anuncio de Macron por parte de la junta gobernante del Consejo Nacional para la Salvaguardia de la Patria (CNSP) en Níger.
Durante gran parte de la última década, Francia ha estacionado miles de tropas en la región del Sahel al sur del desierto del Sahara a pedido de los líderes africanos para luchar contra los grupos yihadistas.
Pero una ola de golpes de estado en Mali, Burkina Faso y, más recientemente, Níger ha provocado la salida de las tropas francesas a las que los líderes golpistas de las antiguas colonias francesas habían ordenado su salida.
Las fuerzas especiales francesas abandonaron Burkina Faso en febrero a petición de la junta militar de ese país y los líderes militares de Níger inmediatamente rescindieron el acuerdo de cooperación con Francia tras el golpe.
La retirada francesa de Níger, que bajo Bazoum había sido un aliado regional, será un duro golpe para los esfuerzos occidentales por luchar contra los afiliados de Al Qaeda y Isis en la región. El ejército estadounidense también tiene una importante presencia militar en Níger, incluida una base utilizada para operaciones con drones.
Al igual que Estados Unidos y la UE, Francia no ha reconocido al gobierno militar de Níger y todavía ve a Bazoum como el único líder democrático legítimo. Durante meses, París se ha negado a retirar a su embajador o a traer de regreso a sus tropas a pesar de la presión del nuevo gobierno de Níger para que lo haga.
Las tensiones entre Francia y Níger han aumentado recientemente cuando Macron dijo que el embajador de Francia, Sylvain Itté, había sido “tomado como rehén” en la embajada, refiriéndose a cómo él y su equipo estaban refugiados y sobreviviendo con raciones militares.
El CNSP había dado a Itté 48 horas para partir a finales de agosto, y el tribunal superior de Níger aprobó su expulsión y revocó su inmunidad diplomática.
Varias protestas exigiendo la retirada de las tropas francesas han tenido lugar frente a una base militar en la capital, Niamey, donde están estacionadas las fuerzas francesas.
Macron defendió el historial militar de Francia en el Sahel y argumentó que la situación de seguridad había empeorado desde los golpes.
«Seguiremos acompañando a los países africanos en la lucha contra el terrorismo, pero sólo si es a petición de gobiernos u organismos regionales elegidos democráticamente», afirmó. «Estoy muy preocupado por la región».