El Departamento de Inmigración (DVZ) ha expulsado a unas 125 personas que forman parte de familias porque Fedasil no tiene lugar para ellos en recepción. “Hoy, por primera vez, no hay acogida para familias”, confirma el portavoz de DVZ, que aún no puede confirmar oficialmente la cifra.
Durante meses ha habido plazas insuficientes para los hombres solicitantes de asilo no acompañados. A principios de esta semana, los menores no acompañados también tuvieron que pasar la noche en la calle. Ahora parece que no hay suficiente espacio para todas las familias que se registraron.
La organización de ayuda Vluchtelingenwerk Vlaanderen ha ofrecido a Fedasil encontrar refugio de emergencia en hoteles esta semana. El jueves por la noche, la ONG buscaba una solución para estas personas en el edificio Pacheco de Bruselas, donde se encuentran DVZ y Fedasil.
“Se trata de familias, incluidos los niños muy pequeños”, dice Tine Claus, directora de Vluchtelingenwerk Vlaanderen. “Varios de ellos encontraron una solución por sí mismos, unos setenta nos alojamos en hoteles”.
Algunos menores no acompañados, que por lo tanto están aquí sin familiares, también reciben refugio a través de Vluchtelingenwerk Vlaanderen. La organización destaca que solo quiere asumir esto durante una semana, para que las familias y los menores no duerman en la calle el próximo fin de semana. “Una vez más las ONG están asumiendo la tarea de proveer vivienda donde el gobierno está fallando”, dice Claus.
La secretaria de Estado de Asilo y Migración, Nicole de Moor (cd&v), se refiere al plan de invierno que presentó al gobierno esta semana. “Algunos colegas en el gobierno quieren discutir esto más a fondo en las próximas semanas”, dijo en un comunicado de prensa. “Sin embargo, no hay tiempo que perder, así que ya estoy implementando las medidas que puedo tomar yo mismo”.
Los otros ministros del gobierno federal apoyan el enfoque del Secretario de Estado, pero los parlamentarios de los partidos mayoritarios están haciendo voces críticas. “Ya no es aceptable”, dijo el diputado del PS Hervé Rigot. “Hay soluciones, pero eso requiere coraje político”.
En los últimos meses, la afluencia de solicitantes de asilo ha seguido aumentando, con 4.009 solicitudes presentadas solo en septiembre, una cifra que no se alcanzaba desde la crisis de refugiados de 2015. Pero el flujo de salida también se estanca: pasa demasiado tiempo antes de que quienes reciben los documentos puedan abandonar el centro de asilo.
¿Y asientos adicionales? Según De Moor, el gran problema es encontrar suficiente personal. Para ello, la Secretaria de Estado cuenta con la ayuda de sus compañeros de Gobierno. “Hasta la fecha, las preguntas han caído sobre una piedra fría”, escribe. “Cuando se me pide que me trascienda a mí mismo, hago un llamado a todos dentro y fuera del gobierno para que se trasciendan a sí mismos y creen lugares que sean operativos”.
Su plan de invierno no está previsto hasta la próxima semana en el núcleo, que incluye a los viceprimeros ministros. Por el momento, la nueva situación no parece acelerar eso.