La NASA ha empujado con éxito al asteroide Dimorphos fuera de su órbita original en el universo, dijo el martes la agencia espacial estadounidense. Es la primera vez que los humanos cambian el curso de un objeto alienígena.
La prueba con Dimorphos fue parte de un experimento. La NASA quiere ver si el método puede usarse en un futuro lejano si tal roca amenaza a la tierra y a la humanidad. Por cierto, Dimorphos no representaba ningún peligro para nuestro planeta.
La roca espacial fue golpeada a 11 millones de kilómetros de la Tierra. Una sonda espacial voló hacia el asteroide a una velocidad de 6 kilómetros por segundo. Todavía se pudieron seguir en directo los últimos metros justo antes de la colisión. Una cámara en la nave espacial capturó imágenes transmitidas por la NASA hasta unos segundos antes de la colisión.
Los científicos están encantados con el éxito del experimento. La misión ha sido calificada como un «gran avance» y una «nueva era para la humanidad» por varios expertos.