Un ex empresario (53) de Emmen tiene que ir a la cárcel durante nueve meses por falsificación. Esto es igual al requerimiento del Ministerio Público (OM). El hombre ahora vive en una habitación en el oeste del país y ha huido de sus acreedores.
En 2019, el empresario de paneles solares le dijo a un financista que tenía suficiente dinero. Al hacerlo, falsificó documentos que supuestamente demostrarían que su empresa estaba en una posición financiera prometedora. El financiero compró las facturas pendientes, para que el empresario no tuviera que esperar por su dinero. Para obtener esa financiación, el ex Emmenaar falsificó un borrador de cuenta anual, un contrato de préstamo y dos extractos bancarios.
Con esto ha sido culpable de falsificación en varias ocasiones, constata el juez. No mucho después de que el empresario hubiera reflejado alegremente su situación financiera, su empresa fue declarada en quiebra. Como resultado, la parte que financia incurrió en una pérdida sustancial, dijo el juez. El empresario pudo haber cambiado de opinión varias veces y poner la verdad sobre la mesa, pero no lo hizo.
El sospechoso persistió en engañar a su financista y así nadó hacia una trampa de la que no pudo salir, tras lo cual la compañía financiera presentó un informe. El empresario de Emmer ya ha sido condenado por falsear el impuesto sobre las ventas. La empresa engañada quería que el empresario le devolviera siete toneladas. Desde entonces, esta cantidad ha sido otorgada en un procedimiento civil.