Mientras que la red móvil de quinta generación (5G) se democratiza en todo el mundo, varios países ya han iniciado sus programas para desarrollar la sexta generación…
Si bien la red móvil de quinta generación (5G) se está volviendo más popular en todo el mundo, varios países ya han iniciado sus programas para desarrollar la sexta generación (6G). Estados Unidos ya está planificando su hoja de ruta, con el objetivo de emerger como el gran ganador frente a China tras el fiasco de la generación anterior.
Una reunión fue encabezada por la Administración Biden en torno al desarrollo de 6G
El 21 de abril, Joe Biden recibió a expertos de empresas privadas, científicos de institutos de investigación, así como a miembros del gobierno especializados en telecomunicaciones. El propósito de esta reunión fue discutir y reflexionar sobre el desarrollo de la próxima generación de red móvil, 6G. Estados Unidos teme quedarse atrás en este sector por parte de China en los próximos años.
La sexta generación es una de las apuestas de la competencia tecnológica en la que se han embarcado las dos superpotencias en los últimos años. En 2021, el Reino Medio tenía más patentes que nadie y ya había puesto en órbita un satélite 6G. A principios de este año, China Unicom, uno de los principales operadores del país, dijo que completaría su fase de investigación y desarrollo para 2025, cuando presentaría sus prototipos.
El gobierno chino espera que los servicios comerciales relacionados con esta nueva tecnología existan antes de que finalice la década. Para el Ministro de Industria y Tecnología de la Información, Jin Zhuanglong, » China lidera el ritmo de investigación y desarrollo de 6G en el mundo, […] mientras ya vamos por delante en el despliegue de redes y aplicaciones móviles 5G «.
Tanto Estados Unidos como China esperan lograr velocidades de conexión increíbles
Un alto representante de la Administración Biden admitió ante la Wall Street Journal eso » China estaba utilizando efectivamente 5G para lograr sus objetivos económicos y de seguridad nacional, como ganar participación en el mercado global. en Occidente para sus empresas de fabricación de telecomunicaciones, de las que Huawei forma parte «. Otro miembro del gobierno aseveró que “ Beijing realmente había priorizado su sector de telecomunicaciones, y creo que es posible que no hayamos «.
Luego de esta reunión, todas las partes interesadas afirmaron que era necesario tomarse el tiempo para asegurar la red, así como su desarrollo en los próximos años, para evitar problemas de confidencialidad. La agresiva política 6G de China tiene sus defectos. Las autoridades europeas también ya han comenzado a trabajar en el tema, como lo demuestra el lanzamiento de un proyecto en Alemania con la participación de Nokia.
Sin embargo, todos los países en la línea de salida tendrán que lidiar con la misma dificultad. Efectivamente, para ofrecer una conexión óptima, cercana, si no igual a la que ofrece la fibra óptica, es interesante utilizar frecuencias de terahercios (THz). Estas frecuencias plantean problemas de distancia de la señal y tienen dificultad para penetrar en ciertos entornos, como nubes o niebla.
Este mes, China habría propuesto una transmisión que alcanzaría una velocidad de 100 Gb/seg. Una velocidad de conexión muy correcta, porque un 50% más consistente que la que puede alcanzar el 5G. Sin embargo, los especialistas coinciden en que si se controlaran mejor las frecuencias de THz, sería posible alcanzar una velocidad de conexión diez veces mayor, llegando a los 1000Gb/seg.