Un ataque estadounidense en Irak mató a un «comandante proiraní» que estaba «implicado en ataques contra las fuerzas estadounidenses». Así lo informó el Departamento de Defensa de Estados Unidos el jueves.
La oficina del primer ministro iraquí, Mohammed Shia al Sudani, calificó el ataque de «agresión flagrante» y «escalada peligrosa».
El ataque estadounidense tuvo como objetivo un líder de Harakat Hezbollah al-Nujaba, una organización armada en Irak, que estaba «participado activamente en la planificación y ejecución de ataques contra personal estadounidense». Otro miembro del grupo también murió en el ataque, según el portavoz del Pentágono, Pat Ryder.
Es probable que el ataque intensifique los llamados a la salida de las tropas estadounidenses de Irak. Estados Unidos tiene alrededor de 2.500 soldados en Irak y 900 en Siria. Forman parte de la coalición internacional liderada por Estados Unidos contra el grupo terrorista Estado Islámico (EI).
En Irak hay muchas críticas al apoyo estadounidense a Israel. Más de 22.000 palestinos, la gran mayoría de ellos civiles, han muerto en la actual guerra entre Israel y Hamás. En las últimas semanas se han producido varios ataques contra tropas estadounidenses en Irak.