Al final no se trataba de puntos, ni de la comparación directa, ni de la diferencia de goles, ni siquiera de los goles que marcamos nosotros mismos. No, en todas estas estadísticas Dinamarca y Eslovenia estaban empatadas en el Grupo B, pero aún quedaba por aclarar quién llegaría a octavos de final como segundo de grupo y quién como tercero. Y esto también responde a la pregunta de quién se enfrentará a la DFB. La solución a la pregunta: las tarjetas amarillas.
Y fue precisamente en esta disciplina, que a primera vista parecía poco importante, donde se produjo la diferencia crucial: Eslovenia recibió siete amonestaciones, Dinamarca sólo seis. La consecuencia: Dinamarca quedó segunda en el grupo como rival de la selección de la DFB debido al índice de juego limpio, los eslovenos jugarán ahora contra Portugal el lunes (21:00 horas, en la transmisión en vivo, en la transmisión de audio y en el ticker en vivo) en Frankfurt.
Novakovic: “El mapa nos ayudó”
Pero cuando miras detenidamente las tarjetas amarillas mostradas, te das cuenta de una cosa: no todas las siete advertencias de los eslovenos fueron para los jugadores en el campo. Uno de ellos, en retrospectiva el decisivo que decidió los octavos de final, fue para Milivoje Novakovic, segundo entrenador de los eslovenos. Una pequeña tarjeta amarilla de gran impacto.
Novakovic, que jugó en el 1. FC Köln de 2006 a 2014, vio la advertencia en el partido contra esos mismos daneses y después se alegró, como reveló en una entrevista al “Süddeutsche Zeitung”. “Creo que no sólo es bueno para nosotros, es realmente fantástico”.enfatizó. “El mapa nos ayudó”. Feliz de quedar tercero en lugar de segundo, eso es raro. Pero el modo EM lo hace posible.
Ahora es contra Portugal
Novakovic informó sobre el escenario que finalmente decidió los encuentros de octavos de final: “Tenía en el partido contra Dinamarca “Hubo una falta muy clara contra nuestro delantero Benjamín Sesko y después de que ya había una escena polémica que se decidió en nuestra contra, protesté”. Un poco demasiado, le advirtió el árbitro Sandro Schärer. “Lo diré de esta manera: fui malo”dijo Novakovic.
Los eslovenos evitaron al equipo alemán, para alegría del exdelantero de la Bundesliga. Los daneses ya quedaron eliminados ante Alemania. La pregunta ahora será si los portugueses son realmente el rival más fácil para los eslovenos. Una cosa está clara: Novakovic esta vez ya no puede ayudar a su equipo con tarjetas amarillas desde el banquillo.