En declaraciones a la prensa francesa, el técnico de 67 años utilizó las siguientes declaraciones:
“Siento que mi salud empeora un poco cada día. Mi cuerpo ya no es lo que solía ser”.
“Me cuesta mantener el equilibrio y me caigo varias veces al día. Me golpeo la cara 10 veces al día. Pero a pesar de todo, sigo vivo”.
El técnico belga, que puso fin a su carrera como entrenador en 2015, declaró: “Ahora renuncio por completo. Tuve que tomar esta decisión debido a mis problemas de salud”.